- C olonos de Paso Tuyá, en el distrito de Azote’y, dijeron ayer valorar el ofrecimiento de ayuda del Gobierno brasileño para resolver el secuestro de Arlan Fick Bremm (16).
PASO TUYÁ, Dpto. de Concepción (Iván Leguizamón, Fernando Romero y Marco Aguiar, enviados especiales; Aldo Rojas y Omar Acosta, corresponsales). El joven permanece en poder del EPP hace 55 días. Instaron al Gobierno paraguayo a aceptar la cooperación para dar una salida favorable al plagio.
Algunos de los pobladores de esta colonia, que pidieron mantener sus nombres en reserva por el miedo en la zona, resaltaron el supuesto ofrecimiento de ayuda del Gobierno brasileño, a través de la Policía Federal, para dilucidar el plagio de Arlan, llevado de su casa el 2 de abril pasado.
Instaron al presidente de la República, Horacio Cartes, y al comandante de la Policía, Crio. Gral. Francisco Alvarenga, a aceptar el ofrecimiento que supuestamente consiste en asesoramiento y en triangulación de comunicaciones.
Dijeron que cualquier recurso empleado a estas alturas para devolver con su familia al menor será válido, en vez de que las fuerzas de seguridad sigan replegadas en el área donde transcurre el ilícito. Según la red O Globo, de Brasil, un enlace de la Policía Federal se puso en contacto con sus pares paraguayos para canalizar la ayuda.
El comandante Alvarenga admitió que semanas atrás ya hubo un acercamiento, pero que finalmente nada fue concretado. Incluso declaró que no se opondría a la cooperación de los brasileños, siempre y cuando sea articulada a través de los servicios diplomáticos o por los conductos gubernamentales correspondientes.
Los colonos de Paso Tuyá permanecen en vilo desde el secuestro de Arlan, lo que prácticamente paralizó por completo la producción en la zona, que a su vez repercute directamente en la economía de sus pobladores.
La colonia Paso Tuyá, situada a cinco kilómetros de la Ruta III, a la altura del kilómetro 381, depende administrativamente del distrito de Azote’y, aunque desde siempre los pobladores subsistieron a base de la ayuda mutua.
La mayoría de las 60 familias que habitan la colonia llegaron desde el estado de Santa Catarina, Brasil, a principios de los años 80 y, desde entonces, convirtieron a esta parte del departamento de Concepción en una de las zonas más prósperas.
Sin embargo, hace dos años, con la primera aparición del EPP en el área, varias familias se marcharon del lugar por los sucesivos atentados, que incluyen asaltos, asesinatos, incendios y ahora el secuestro de un menor.
Algunos de los pobladores de esta colonia, que pidieron mantener sus nombres en reserva por el miedo en la zona, resaltaron el supuesto ofrecimiento de ayuda del Gobierno brasileño, a través de la Policía Federal, para dilucidar el plagio de Arlan, llevado de su casa el 2 de abril pasado.
Instaron al presidente de la República, Horacio Cartes, y al comandante de la Policía, Crio. Gral. Francisco Alvarenga, a aceptar el ofrecimiento que supuestamente consiste en asesoramiento y en triangulación de comunicaciones.
Dijeron que cualquier recurso empleado a estas alturas para devolver con su familia al menor será válido, en vez de que las fuerzas de seguridad sigan replegadas en el área donde transcurre el ilícito. Según la red O Globo, de Brasil, un enlace de la Policía Federal se puso en contacto con sus pares paraguayos para canalizar la ayuda.
El comandante Alvarenga admitió que semanas atrás ya hubo un acercamiento, pero que finalmente nada fue concretado. Incluso declaró que no se opondría a la cooperación de los brasileños, siempre y cuando sea articulada a través de los servicios diplomáticos o por los conductos gubernamentales correspondientes.
Los colonos de Paso Tuyá permanecen en vilo desde el secuestro de Arlan, lo que prácticamente paralizó por completo la producción en la zona, que a su vez repercute directamente en la economía de sus pobladores.
La colonia Paso Tuyá, situada a cinco kilómetros de la Ruta III, a la altura del kilómetro 381, depende administrativamente del distrito de Azote’y, aunque desde siempre los pobladores subsistieron a base de la ayuda mutua.
La mayoría de las 60 familias que habitan la colonia llegaron desde el estado de Santa Catarina, Brasil, a principios de los años 80 y, desde entonces, convirtieron a esta parte del departamento de Concepción en una de las zonas más prósperas.
Sin embargo, hace dos años, con la primera aparición del EPP en el área, varias familias se marcharon del lugar por los sucesivos atentados, que incluyen asaltos, asesinatos, incendios y ahora el secuestro de un menor.
Fuente: ABC
