Asimismo, el jefe policial se reunió con los padres del agente Edelio Morínigo, quien lleva 4 años y 7 meses desaparecido.
En la comunidad de Kurusu Isabel, a 15 km de la ciudad de Concepción, está la casa del suboficial Martínez, herido por una bomba dejada en la camioneta del ganadero Fidel Zavala el día de su secuestro en el 2009.
El joven se encuentra en cama y precisa de atenciones especiales. Ayer la comitiva, también integrada por médicos, fiosioterapeutas y nutricionistas, le realizaron una evaluación. Además, le donaron una silla especial para baño y medicamentos varios.
La comitiva policial luego visitó en Horqueta al suboficial Fariña, quien quedó en silla de ruedas tras recibir varios impactos de esquirlas disparadas por una bomba casera detonada por miembros del EPP el 21 de abril de 2013 en la zona de Paso Tuya, Azotey. Vázquez consultó a Fariña si no podría trabajar como recepcionista de denuncias en la comisaría más cercana, pero el agente dijo que le resulta difícil movilizarse solo.