- La Policía Nacional pide precaución a la ciudadanía ante los casos de llamadas extorsivas de supuestos miembros del EPP.
Continúan en aumento los casos de estafadores que se hacen pasar por miembros del EPP, para conseguir millonarias cifras a cambio de “evitar” el secuestro de alguno de sus familiares.
Mediante un comunicado, la Policía Nacional advirtió acerca de las llamadas extorsivas de desconocidos que se hacen pasar por militantes del grupo armado que opera en el Norte del país.
Los timadores exigen que altas sumas de dinero sean enviadas a través de giros, para evitar ser víctimas de secuestro.
Los estafadores proporcionan datos sobre las supuestas víctimas mencionando los lugares que frecuentan, la dirección de su domicilio, el nombre y demás, a fin de ejercer presión sobre sus familiares.
Los agentes policiales instan a la ciudadanía a denunciar los casos de extorsión en la comisaría más cercana o mediante una llamada de alerta al 911 para proveer el número telefónico del cual recibió la llamada, a fin de iniciar las investigaciones y dar con los responsables.
Los efectivos aseguran que las amenazas son falsas, pues la mayoría de las llamadas de advertencia se originan desde la carcel.
Mediante un comunicado, la Policía Nacional advirtió acerca de las llamadas extorsivas de desconocidos que se hacen pasar por militantes del grupo armado que opera en el Norte del país.
Los timadores exigen que altas sumas de dinero sean enviadas a través de giros, para evitar ser víctimas de secuestro.
Los estafadores proporcionan datos sobre las supuestas víctimas mencionando los lugares que frecuentan, la dirección de su domicilio, el nombre y demás, a fin de ejercer presión sobre sus familiares.
Los agentes policiales instan a la ciudadanía a denunciar los casos de extorsión en la comisaría más cercana o mediante una llamada de alerta al 911 para proveer el número telefónico del cual recibió la llamada, a fin de iniciar las investigaciones y dar con los responsables.
Los efectivos aseguran que las amenazas son falsas, pues la mayoría de las llamadas de advertencia se originan desde la carcel.
Fuente: HOY
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