Decepción y desgano se pueden notar en los
policías asignados a trabajar en Concepción, luego de la falta de apoyo que
recibieron a sus versiones sobre los supuestos ataques realizados por el EPP.
Las reiteradas
actitudes de descréditos que muestran las autoridades superiores contra los
suboficiales y oficiales subalternos que denunciaron sufrir ataques del
Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), causa decepción y molestia en el cuadro
policial de Concepción.
Según explicaron, lo más complicado es que no
pueden manifestar sus inquietudes, porque tienen una disposición de no dar
ninguna declaración a los medios de prensa, respecto a los hechos que suceden
en el marco del estado de excepción y menos contradecir las informaciones
oficiales.
Varios uniformados manifestaron a través del
anonimato, que el último acontecimiento ocurrido en el destacamento policial de
Jhuguá Ñandú (supuesto ataque de EPP a policías) ha creado un total estado de
desconcierto entre sus camaradas, ya que, a igual que aquel episodio de Capitán
Giménez (también fue herido un suboficial con arma de fuego desde la oscuridad)
de nuevo sus superiores no aceptan la versión de los agentes afectados y buscan
castigar a sus subalternos.
Indicaron que con esta actitud, lo único que hacen
es menospreciar y desanimar sus trabajos, que por la coyuntura, se vuelven muy
difíciles y peligrosos. "A parte de no tener la mínima seguridad, ni armas
largas ni chalecos antibalas, ahora con cada ataque del EPP o de cualquier
delincuente, tenemos que ser nosotros los arrestados y sumariados", dijo
un suboficial que presta servicio en el campo.
INDISCIPLINA.
El comisario Aldo
Pastore, subcomandante de la Policía, indicó que los cambios y los arrestos se
dan solo por indisciplinas y no por ataque o no del EPP.
"Lo que pasa es que no cumplen con las
disposiciones vigentes, no están atentos, ingieren bebidas alcohólicas, van a
morir todos si son descuidados", dijo el comisario Pastore.
Agregó que en los dos casos, de Capitán Giménez y
Jhuguá Ñandú, hubo desatenciones de los uniformados y que por eso hubo arrestos
y que mientras él siga al frente serán castigados los suboficiales que no se
disciplinan. Indicó que si son inútiles deben ir a su casa, porque esto no es
un juego sino una guerra.
Explicó que el hecho de Jhuguá Ñandú, ocurrido el
lunes, donde dos suboficiales fueron heridos con arma de fuego, se va a aclarar
con las pericias realizadas, cuyos resultados se aguardan.
EN DOS CASOS.
En la noche del 5 de
octubre pasado, los policías que se encontraban realizando un control frente a
la subcomisaría de Capitán Giménez recibieron disparos de arma de fuego,
resultando herido el suboficial Raimundo Ismael Pereira, quien dijo que fue
atacado desde el monte. A esta manifestación salió al paso el ministro del
Interior, Carlos Filizzola, quien indicó que el hecho habría sido accidental y
que no fue del EPP.
El oficial Virino Vera
también dijo que aquel hecho fue un ataque de la banda terrorista, por lo cual
luego fue cambiado de la jefatura de la sede policial.
Ahora nuevamente con lo sucedido en la noche del
lunes en Jhuguá Ñandú, y donde fueron heridos los suboficiales Fidencio
Maldonado y Silvio León, existe otra vez contradicciones entre lo manifestado
por los policías afectados y lo que manifiesta el subcomandante de la Policía
Nacional, Aldo Pastore, quien cree que fue un accidente y que incluso el grupo
de policías habría estado tomando bebidas alcohólicas. Precisamente el oficial
inspector Mauricio González fue destituido también de la jefatura de la
Agrupación Táctica Regional de Jhuguá Ñandú.
AGENTE SE RATIFICA
El oficial inspector Mauricio González, ex jefe de
la Agrupación Táctica Regional de Jhuguá Ñandú, declaró ante la Fiscalía de
Concepción, ocasión en que se ratificó en su posición en que hubo ataque de
desconocidos que abrieron fuego contra los uniformados. Manifestó en la Fiscalía,
al igual que sus camaradas, que no hubo ingesta de alcohol y que fueron
sorprendidos por los que tiraron contra el destacamento y luego contra la
patrullera. La misma declaración acercó al diputado José López Chávez,
presidente de la comisión de Defensa y Seguridad Interna de Diputados, quien
conversó con él en el aeropuerto de Concepción.
Si bien se negó a hablar con la prensa, este medio
accedió a sus declaraciones vertidas en las dos instancias, en donde indicó que
no negará la verdad, ni sus 9 camaradas que estuvieron en el destacamento.