- El coronel Ramón Benítez, nuevo comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta, sostuvo que su prioridad será el rescate de Arlan Fick y de Edelio Morínigo, además de la "eliminación" del EPP.
El Cnel. Ramón Benítez reemplaza desde hoy al Gral. Mario Restituto González, quien fue relevado del cargo luego de casi un año de gestión al frente de la lucha contra el EPP. El cambio se produjo luego de que en reiteradas ocasiones se mencionara que el presidente Cartes estaría impaciente y preocupado por la falta de resultados.
La situación de ansiedad de la misma ciudadanía empeoró con el secuestro de Arlan Fick, quien lleva más de cuatro meses secuestrado. Igualmente, se encuentra desaparecido desde hace un mes el suboficial Edelio Morínigo, quien igualmente estaría en manos del grupo criminal.
Al ser abordado sobre sus prioridades, el flamante comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta mencionó que recibió instrucciones de volcar todos sus esfuerzos en el rescate de Arlan, además del uniformado. “Mi prioridad va a ser rescatarlos y eliminar a este grupo delictivo, si la oportunidad se da”, sostuvo.
Garantizó que Cartes, como comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, le dio plena potestad para actuar de inmediato, en caso de lograr aún contacto con los criminales. “Si le tenemos cerca a este grupo, no vamos a dudar un segundo para actuar”, aseveró.
CAMBIO DE MANDO
El nombramiento del coronel Benítez constituye un nuevo giro en la lucha contra el EPP, puesto que el flamante comandante es un agente operativo que ya había sido entrenado en el campo para estas situaciones.
Comentó que tanto él como los integrantes de las tropas desplegadas en el Norte fueron entrenados desde 2004 por los destacamentos de EE.UU. y garantizó que ya conoce la capacidad de los hombres que desde ahora tiene a su cargo como comandante de la FTC. “En un 95%, los hombres desplegados en el Norte son mi personal o excompañeros de curso”, refirió.
El cambio de mando de la lucha contra el EPP tiene lugar a solo unos días de que el ministro del Interior, Francisco de Vargas, señalara la necesidad de “correcciones” en las tareas en el Norte. Hasta el momento, los operativos en San Pedro y Concepción fueron infructuosos. Los logros más resaltantes se limitaron al hallazgo de campamentos; no obstante, los criminales siempre consiguen huir a tiempo.
Encabezó el atropello a policías en Hugua Ñandu
La situación de ansiedad de la misma ciudadanía empeoró con el secuestro de Arlan Fick, quien lleva más de cuatro meses secuestrado. Igualmente, se encuentra desaparecido desde hace un mes el suboficial Edelio Morínigo, quien igualmente estaría en manos del grupo criminal.
Al ser abordado sobre sus prioridades, el flamante comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta mencionó que recibió instrucciones de volcar todos sus esfuerzos en el rescate de Arlan, además del uniformado. “Mi prioridad va a ser rescatarlos y eliminar a este grupo delictivo, si la oportunidad se da”, sostuvo.
Garantizó que Cartes, como comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, le dio plena potestad para actuar de inmediato, en caso de lograr aún contacto con los criminales. “Si le tenemos cerca a este grupo, no vamos a dudar un segundo para actuar”, aseveró.
CAMBIO DE MANDO
El nombramiento del coronel Benítez constituye un nuevo giro en la lucha contra el EPP, puesto que el flamante comandante es un agente operativo que ya había sido entrenado en el campo para estas situaciones.
Comentó que tanto él como los integrantes de las tropas desplegadas en el Norte fueron entrenados desde 2004 por los destacamentos de EE.UU. y garantizó que ya conoce la capacidad de los hombres que desde ahora tiene a su cargo como comandante de la FTC. “En un 95%, los hombres desplegados en el Norte son mi personal o excompañeros de curso”, refirió.
El cambio de mando de la lucha contra el EPP tiene lugar a solo unos días de que el ministro del Interior, Francisco de Vargas, señalara la necesidad de “correcciones” en las tareas en el Norte. Hasta el momento, los operativos en San Pedro y Concepción fueron infructuosos. Los logros más resaltantes se limitaron al hallazgo de campamentos; no obstante, los criminales siempre consiguen huir a tiempo.
Encabezó el atropello a policías en Hugua Ñandu
La designación del coronel Ramón Benítez como nuevo comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), en reemplazo del general de división Mario Restituto González, acarrearía un distanciamiento aún más acentuado entre los policías y militares que supuestamente deberían trabajar unidos contra el EPP, debido a los serios cuestionamientos que pesan sobre el alto oficial castrense.
Benítez, quien venía desempeñándose como comandante de las Tropas Especiales del Ejército y, a la vez, jefe de Estado Mayor de la FTC, quedó “marcado” por policías después de encabezar un contingente de 300 militares que atropelló la subcomisaría 27ª de Hugua Ñandu, en la madrugada del 9 de mayo de 2010. Los militares irrumpieron a tiros en la unidad policial, redujeron a golpes a los agentes y literalmente les robaron las pistolas y los fusiles, después de rodear el casco urbano de la colonia, donde supuestamente estaba una de las líderes del EPP Magna Meza.
El operativo resultó un fracaso, ya que la criminal no fue localizada y el bochornoso episodio provocó luego serios cuestionamientos al gobierno de Fernando Lugo, también agudizó el recelo existente entre las Fuerzas Armadas y la Policía. En el departamento de Concepción, los agentes policiales exteriorizaron su disgusto e indignación porque tendrán que trabajar a cargo del militar.
Asimismo, el coronel Benítez fue el comandante del grupo táctico militar que dejó escapar a todos los integrantes de la célula del EPP, encabezada por los hermanos Albino y Alfredo Jara Larrea, durante un frustrado asalto a su campamento del asentamiento Núcleo 2 de la localidad de Arroyito, el 5 de febrero pasado.
Fuente: ABC
Benítez, quien venía desempeñándose como comandante de las Tropas Especiales del Ejército y, a la vez, jefe de Estado Mayor de la FTC, quedó “marcado” por policías después de encabezar un contingente de 300 militares que atropelló la subcomisaría 27ª de Hugua Ñandu, en la madrugada del 9 de mayo de 2010. Los militares irrumpieron a tiros en la unidad policial, redujeron a golpes a los agentes y literalmente les robaron las pistolas y los fusiles, después de rodear el casco urbano de la colonia, donde supuestamente estaba una de las líderes del EPP Magna Meza.
El operativo resultó un fracaso, ya que la criminal no fue localizada y el bochornoso episodio provocó luego serios cuestionamientos al gobierno de Fernando Lugo, también agudizó el recelo existente entre las Fuerzas Armadas y la Policía. En el departamento de Concepción, los agentes policiales exteriorizaron su disgusto e indignación porque tendrán que trabajar a cargo del militar.
Asimismo, el coronel Benítez fue el comandante del grupo táctico militar que dejó escapar a todos los integrantes de la célula del EPP, encabezada por los hermanos Albino y Alfredo Jara Larrea, durante un frustrado asalto a su campamento del asentamiento Núcleo 2 de la localidad de Arroyito, el 5 de febrero pasado.
Fuente: ABC