El sicario Roberto Rodríguez González, al verse rodeado por los policías, se entregó el martes último en la zona de Yby Yaú, Concepción. Se lo considera como autor material del asesinato del jefe comunal y su empleado, tras lo cual fue derivado a la jefatura de Policía de Amambay, en Pedro Juan Caballero.
El doble homicidio se registró en la tarde del viernes 5 de agosto pasado, en una localidad distante 50 kilómetros del centro urbano de Bella Vista Norte, donde Louteiro verificaba los trabajos de reparación de un puente, señalaron.
De acuerdo con el informe forense, el intendente acusó 23 disparos, en tanto que el secretario de este, Celso Carballo, fue eliminado de 16 disparos, todos efectuados con una pistola 9 mm. El atentado fue perpetrado frente a los obreros que trabajaban en la refacción del puente, fue por ello que la policía no tardó en identificar al asesino.
Trasfondo de drogas
Los investigadores manejan el dato de que el crimen guarda estrecha relación con el decomiso de 417 kilos de cocaína realizado el 23 de julio último en dicha comunidad. Aparentemente, los narcos que abandonaron la carga a causa del asedio de los efectivos de la Secretaría Nacional Antidrogas, debían pagar la mercadería que perdieron con un terreno. Sobre este inmueble, sin embargo, con anterioridad, hicieron un trato con Louteiro, quien incluso ya les pagó una parte. El jefe comunal luego se negó a rescindir el contrato por las tierras, decisión que finalmente le costó la vida.
El pistolero Rodríguez es miembro de la facción criminal que tiene el control actualmente en Amambay, tras la muerte de Jorge Rafaat Toumani, señalaron.
Igualmente, la reciente masacre de una familia, padre, madre e hijo, también en Bella Vista Norte, tendría conexión con el crimen del intendente.
ABC