- La ruta 5 "General Bernardino Caballero", que une Pozo Colorado con Concepción, se encuentra en deplorable estado. Grandes pozos y el asfalto destruido forman parte del trazado por el que circula una gran cantidad de vehículos.
Transitar por la Ruta 5 se ha convertido en una verdadera odisea.
El tramo que une las ciudades de Pozo Colorado y Concepción es transitado diariamente por una gran cantidad de rodados de diferentes tamaños. Desde pequeños autos familiares hasta grandes buses y camiones de gran porte utilizan esta ruta.
Sin embargo, la ruta se encuentra en un estado deplorable.
En varios puntos de la ruta, grandes pozos se adueñan de la misma, convirtiéndose en una gran amenaza para quienes transitan por allí. Además, el asfaltado -que tiene todavía muy poco tiempo- se encuentra totalmente destruido en varios tramos.
A los costados se puede observar cómo el asfalto se encuentra totalmente levantado, dando muestras de la dudosa calidad del trabajo allí realizado. En varios puntos, la ruta asfaltada tiene el aspecto de un camino de tierra.
Muchos optan por evadir estos puntos bajando a la banquina para transitar.
Las lluvias caídas en los últimos días dejaron como consecuencia grandes cantidades de barro, por lo que la circulación se volvió aún más tormentosa.
Según pobladores de las zonas aledañas, hasta el momento no existen promesas de las autoridades para la reparación de la ruta. Lo único que se ha hecho es colocar carteles en algunas de las zonas, mientras que en otras no existe señalización alguna y más de un vehículo terminó cayendo en los enormes pozos de la ruta.
Fuente: ABC
El tramo que une las ciudades de Pozo Colorado y Concepción es transitado diariamente por una gran cantidad de rodados de diferentes tamaños. Desde pequeños autos familiares hasta grandes buses y camiones de gran porte utilizan esta ruta.
Sin embargo, la ruta se encuentra en un estado deplorable.
En varios puntos de la ruta, grandes pozos se adueñan de la misma, convirtiéndose en una gran amenaza para quienes transitan por allí. Además, el asfaltado -que tiene todavía muy poco tiempo- se encuentra totalmente destruido en varios tramos.
A los costados se puede observar cómo el asfalto se encuentra totalmente levantado, dando muestras de la dudosa calidad del trabajo allí realizado. En varios puntos, la ruta asfaltada tiene el aspecto de un camino de tierra.
Muchos optan por evadir estos puntos bajando a la banquina para transitar.
Las lluvias caídas en los últimos días dejaron como consecuencia grandes cantidades de barro, por lo que la circulación se volvió aún más tormentosa.
Según pobladores de las zonas aledañas, hasta el momento no existen promesas de las autoridades para la reparación de la ruta. Lo único que se ha hecho es colocar carteles en algunas de las zonas, mientras que en otras no existe señalización alguna y más de un vehículo terminó cayendo en los enormes pozos de la ruta.
Fuente: ABC