El presidente del Senave, Dr. Hugo Idoyaga, presentó una denuncia ante el Ministerio Público por supuestos hechos punibles, producción de documentos no auténticos, producción mediata de documentos públicos de contenido falso, a fin de determinar la responsabilidad referente al ingreso de carne vacuna del Brasil sin certificación sanitaria, según se conoció ayer.
La denuncia está basada en la presunción de la Dirección de Aduanas de que algunas autorizaciones de importación tienen el mismo número pero con diferentes contenidos; no coinciden los datos que figuran en las autorizaciones, tales como fecha de expedición, mercadería, procedencia, exportador, dirección, transporte, importador, dirección, lugar y fecha de ingreso, número de expediente, entre otros.
Según el escrito, se presume que las autorizaciones que se mencionan en el pedido formulado por Aduanas “son producción de contenido falso”, dice Senacsa.
Agrega que del listado de autorizaciones en ciertos casos “no existen. Es decir, no han sido emitidos por el Senacsa, por lo que se presume documentos falsificados”. Pide se libre oficio a Aduanas para que remita al Ministerio Público el legajo del despacho de importación que detallan en el listado proveído por Aduanas.
También que se formule imputación y posterior acusación en contra de infractores que deriven de la investigación fiscal, a fin de cumplir la máxima prevista y penada en la legislación.
Punta del ovillo
Por su parte, el titular de Agricultura y Ganadería, Marcos Medina, dijo que la situación afecta a una sola empresa, no es una cuestión generalizada de la industria y la cadena cárnica de valor.
Indicó que con la incautación del cargamento de carne por parte de la Conalcat “encontramos la punta de un ovillo que estamos tratando de desmarañar. Eso significa que nuestros controles han funcionado para detectar la irregularidad”.
Apuntó que la instrucción para las instituciones es “cero tolerancia. Tenemos que llegar hasta el fondo del asunto, desentrañar la maraña de cuestiones que están descubriendo y llegar a los responsables, sea del sector público o privado, y sancionar como corresponde”.
“El mensaje a quienes estuvieron involucrados es que la patria y el país están por encima de todo y que los hechos ponen en peligro a toda la industria cárnica y todo lo que se hizo por décadas. También es un mensaje claro al mercado internacional de que estamos trabajando para llegar al fondo de la cuestión y tomar las medidas sin ningún tipo de contemplación”, concluyó.
ABC