- CONCEPCIÓN.- Aunque no descarta la posibilidad, el fiscal Celso Morales, que investiga la causa de la muerte violenta del peón de la estancia Agüerito, Isidro Villalba Cáceres, considera que los autores no serían del EPP.
La investigación apunta a otro grupo criminal que opera en la zona.
El agente fiscal de Concepción destacó que los indicios obtenidos hasta el momento no son suficientes para confirmar que los autores hayan sido del Ejército del Pueblo Paraguayo.
Comentó que la esposa de la víctima no vio ninguna identificación en la ropa de los asaltantes, que generalmente tiene la inscripción EPP. Además, sostuvo que el arma utilizada posiblemente fue una pistola, mientras el grupo armado acostumbra usar armas de grueso calibre.
Otro hecho que pone en duda que el caso sea del grupo armado es que el EPP siempre se atribuye los hechos y argumenta los motivos, lo cual no ha ocurrido en esta ocasión.
“Nosotros creemos que este crimen guarda relación con la muerte de los dos peones de la misma estancia ocurrida en febrero de este año, él posiblemente manejaba datos al respecto y lo silenciaron”, destacó el fiscal.
Indicó que en la zona opera una banda de abigeos muy poderosa que bien podría tener vinculación en estos crímenes, sin descartar también la posibilidad de participación de la mafia de los narcotraficantes.
“Pasa que aprovechan estas circunstancias utilizando ropas para’i para perpetrar sus crímenes y hacer aparentar como hechos del EPP”, señaló.
Puso como ejemplo la organización mafiosa de abigeos que ya provocó dos golpes grandes haciéndose pasar por elementos del EPP.
Morales indicó que el avance de la investigación es importante y que en los próximos días podría identificarse al grupo que cometió el asesinato.
La Policía también maneja la misma hipótesis, es decir, aunque no descarte que fuesen miembros del EPP, consideran que fueron criminales comunes que ultimaron al peón por alguna información que manejaba.
La sospecha es que la víctima tuvo conocimiento de los autores del doble asesinato ocurrido el pasado 27 de febrero, en el inmueble de la estancia Agüerito, donde hombres armados ultimaron a estocadas a Cristino Dávalos y Jorge Sosa.
Ultima hora