La Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) alegó ayer en Concepción que los dos militares fallecidos el miércoles de noche en una explosión de un vehículo de la Senad fueron víctimas de un atentado.
Supuestamente, el agente especial antidrogas sobreviviente declaró que un motociclista arrojó un “bulto” debajo del móvil, en plena persecución sobre la Ruta V, en la zona de Cuero Fresco, Horqueta.
En una conferencia de prensa llevada a cabo ayer al mediodía en la sede de la Cuarta División de Infantería, en la ciudad de Concepción, el fiscal antisecuestro local Joel Cazal y el vocero de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), teniente coronel Víctor Urdapilleta, dieron a conocer la versión oficial del Gobierno sobre la explosión en la que fallecieron el capitán de Ingeniería Enrique Daniel Piñánez Ciancio, de 34 años, quien prestaba servicios en el Comando de Ingeniería del Ejército y el suboficial de Infantería José Manuel González Ferreira, de 39 años, quien figuraba en la Dirección de Inteligencia de las FF. MM.
La explicación de la FTC refiere que los dos militares ahora fallecidos y el agente especial de la Senad Juan Manuel Jara, director de la nueva unidad de Narcoterrorismo, circulaban a bordo de la camioneta Toyota RAV4 de la entidad antidrogas desde Yby Yaú hacia Horqueta.
ENTREGA VIGILADA
Siempre según los datos aportados ayer, los miembros de la FTC hacían una patrulla en la zona de la localidad de Cuero Fresco ante una información recibida acerca de una supuesta entrega de explosivos.
A la altura del kilómetro 87,5 de la Ruta V “Gral. Bernardino Caballero”, aproximadamente a las 20:15, los uniformados divisaron a una persona sospechosa que se movilizaba en una motocicleta.
Entonces, el agente especial Jara, quien supuestamente manejaba el móvil, efectuó una maniobra para interceptar al motociclista, pero este arrojó un bulto en uno de los costados de la camioneta y huyó, conforme al relato.
El fiscal Cazal declaró que ya inmediatamente después se produjo la explosión mortal.
La FTC refirió además que Juan Manuel Jara ya no recuerda más nada de lo que ocurrió después y que también sufrió la pérdida parcial de la audición.
En una conferencia de prensa llevada a cabo ayer al mediodía en la sede de la Cuarta División de Infantería, en la ciudad de Concepción, el fiscal antisecuestro local Joel Cazal y el vocero de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), teniente coronel Víctor Urdapilleta, dieron a conocer la versión oficial del Gobierno sobre la explosión en la que fallecieron el capitán de Ingeniería Enrique Daniel Piñánez Ciancio, de 34 años, quien prestaba servicios en el Comando de Ingeniería del Ejército y el suboficial de Infantería José Manuel González Ferreira, de 39 años, quien figuraba en la Dirección de Inteligencia de las FF. MM.
La explicación de la FTC refiere que los dos militares ahora fallecidos y el agente especial de la Senad Juan Manuel Jara, director de la nueva unidad de Narcoterrorismo, circulaban a bordo de la camioneta Toyota RAV4 de la entidad antidrogas desde Yby Yaú hacia Horqueta.
ENTREGA VIGILADA
Siempre según los datos aportados ayer, los miembros de la FTC hacían una patrulla en la zona de la localidad de Cuero Fresco ante una información recibida acerca de una supuesta entrega de explosivos.
A la altura del kilómetro 87,5 de la Ruta V “Gral. Bernardino Caballero”, aproximadamente a las 20:15, los uniformados divisaron a una persona sospechosa que se movilizaba en una motocicleta.
Entonces, el agente especial Jara, quien supuestamente manejaba el móvil, efectuó una maniobra para interceptar al motociclista, pero este arrojó un bulto en uno de los costados de la camioneta y huyó, conforme al relato.
El fiscal Cazal declaró que ya inmediatamente después se produjo la explosión mortal.
La FTC refirió además que Juan Manuel Jara ya no recuerda más nada de lo que ocurrió después y que también sufrió la pérdida parcial de la audición.
NUEVA VERIFICACIÓN
Por otro lado, ayer de mañana se hizo una nueva verificación en la escena de la explosión, de donde se pudieron recoger muchos restos humanos.
La magnitud de la detonación fue tal que parte del techo del rodado fue rescatada a unos 200 metros del lugar.
Fuente: ABC
Por otro lado, ayer de mañana se hizo una nueva verificación en la escena de la explosión, de donde se pudieron recoger muchos restos humanos.
La magnitud de la detonación fue tal que parte del techo del rodado fue rescatada a unos 200 metros del lugar.
Fuente: ABC