El médico cubano Jorge Luis Gómez, descontratado de su puesto en Arroyito, aseguró desconocer el motivo de su salida y desmintió que alguna vez haya atendido a algún miembro del EPP. Aclaró que sí prestó atención a familiares del grupo.
Posteriormente, desde una radio que entrevistó al director regional le informaron que aparentemente todo fue “por mal trabajo”. “Pero bajo qué argumentos señalan mal trabajo, cuando en diciembre fui evaluado con nota satisfactoria”, refirió. Comentó que hace apenas una semana le habían renovado su contrato para el corriente año. “Tres días después de mi evaluación me renovaron el contrato y ocho días después ya mi evaluación es negativa y mi trabajo es malo. No entiendo”, indicó.
Sobre los supuestos vínculos con el EPP, aclaró que nunca tuvo contacto alguno con miembros de esta banda. “Jamás he atendido a ninguno de los miembros de estos que se cuestionan”, refirió. Posteriormente, aclaró que sí prestó atención médica a familiares de algunos integrantes del grupo. “Si me cuestionan por atender a la hermana o los parientes, eso es parte de mi trabajo”, refirió.
Recordó que hace algunos días acudió hasta el puesto de salud la hermana de uno de los criminales abatidos. “La trajeron desmayada (...) y yo le doy servicios a todo el que venga ahí”, reafirmó. Insistió en que “desde que este grupo está siendo buscado jamás tuve contacto físico con nadie”.
Desde el Ministerio de Salud aclararon que la desvinculación obedece a que el profesional se ausentó de manera excesiva en su puesto de trabajo. “Hay asistencia muy irregular de este colega; no tiene nada que ver con el tema EPP”, explicó el César Pimienta, director de Recursos Humanos de la cartera.
Jorge Luis González presta atención en la Unidad de Salud Familiar de Arroyito desde hace seis años. El profesional extranjero, radicado en Paraguay hace 13 años, comentó que a su cargo está la atención de más de 5.000 habitantes de Concepción.
Aparece en agenda del EPP como el Tío Julio
El médico cubano fue destituido por el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social por incumplimiento, según las autoridades sanitarias. Fuentes indicaron que el hombre solo atendía hasta el mediodía en el centro de salud, y luego en su vivienda, a unos 1.000 metros del lugar, donde contaba con ambulancia y medicamentos, que presuntamente faltaban en el hospital público.
Investigadores indicaron que la vivienda del hombre estaba marcada en la agenda del grupo terrorista incautada tras el secuestro y ejecución de los ciudadanos alemanes Robert Natto y Érika Reiser, en Azotey, en la colonia Herminio Mendoza, distrito de Yby Yaú.
Pero incluso, en la agenda del EPP no figuraba el nombre del médico cubano ni tampoco señalaba como centro médico, sino estaba marcado con un alias, el de Tío Julio, confirmaron fuentes que se encargan de la investigación.
Otro de los datos es que el médico no tenía un censo de adolescentes de 10 a 15 años de edad, registros que resultan relevantes. Solo tenía registros de niños hasta cinco años, según mencionaron fuentes de ÚH.
Además, se le objeta el mal estado de salud del centro asistencial, donde la ambulancia está bajo un mango y donde no había un buen cuidado de las instalaciones.
Un dato no menor es que incluso, el mismo profesional en contacto con Radio Monumental indicó que conocía a Alejandro Ramos Morel, actual hombre fuerte del EPP. Pero sostuvo que era en la época en que Jota era dirigente campesino de la Organización Campesina del Norte (OCN).
ABC/HOY
