CONCEPCIÓN.- Un confuso hecho de intervención policial derivó en denuncias. La Policía detuvo a un militar por perturbación de la paz pública, mientras la esposa del uniformado denuncia públicamente por abuso de autoridad y tortura a policías. El hecho comenzó el domingo de madrugada cuando la Policía fue alertada por un vecino del barrio Itacurubí.
Tres policías de Investigación de Delitos llegaron al lugar donde se produjo un fuerte altercado con el sargento 1º de Infantería Derlis Hugo Villalba Arzamendia (30). Hubo disparos, golpes y violencia para arrestarle al militar, según el subcomisario Hugo Grance, jefe de Investigaciones de la Policía de Concepción.
Dijo que ese militar y otros uniformados se encontraron en la avenida de Pinedo perturbando con el alto volumen del equipo de sonido. Comentó que Villalba salió del lugar y fue a disparar al aire libre a lo que fue otra patrulla, pero en un vehículo particular. “Procedimos en forma, el hombre opuso resistencia y propinó golpes a los intervinientes”. El militar fue derivado al Hospital Regional esa misma madrugada, luego fue trasladado al Hospital Militar, de donde salió de alta. Fue procesado por la Fiscalía y recibió prisión domiciliaria.
Por su parte, María Luz Pavón, esposa del militar, dijo que prepara una denuncia en contra de los policías por tortura y abuso de autoridad. Exhibió fotografías captadas a su marido. Indicó que los policías llegaron a su casa sin uniforme y en vehículo particular, lo cual obligó a su marido a tomar las precauciones porque creyeron que eran asaltantes. “Con mucha violencia detuvieron a mi esposo frente a mí y mis hijos con muchos golpes, un escándalo se armó”, destacó.
Dijo que ese militar y otros uniformados se encontraron en la avenida de Pinedo perturbando con el alto volumen del equipo de sonido. Comentó que Villalba salió del lugar y fue a disparar al aire libre a lo que fue otra patrulla, pero en un vehículo particular. “Procedimos en forma, el hombre opuso resistencia y propinó golpes a los intervinientes”. El militar fue derivado al Hospital Regional esa misma madrugada, luego fue trasladado al Hospital Militar, de donde salió de alta. Fue procesado por la Fiscalía y recibió prisión domiciliaria.
Por su parte, María Luz Pavón, esposa del militar, dijo que prepara una denuncia en contra de los policías por tortura y abuso de autoridad. Exhibió fotografías captadas a su marido. Indicó que los policías llegaron a su casa sin uniforme y en vehículo particular, lo cual obligó a su marido a tomar las precauciones porque creyeron que eran asaltantes. “Con mucha violencia detuvieron a mi esposo frente a mí y mis hijos con muchos golpes, un escándalo se armó”, destacó.
UH