La fotografía corresponde a la calle Timbó que se llena de agua y deja grandes charcos, a tal punto que ya no permite el tránsito de ningún tipo de vehículos.
“Hace tiempo que está así, es increíble que las autoridades no nos hagan caso”, señaló Herminia Martínez, vecina del lugar. Comentó que a los patios baldíos en mal estado se suma la calle que, con una pequeña lluvia, ya se vuelve totalmente intransitable.
“Muchas personas ya cayeron en este lugar y cuando comiencen las clases no sé cómo nuestros hijos irán a su escuela”, destacó doña Herminia. Dos cuadras de la calle Timbó se hallan en estado desastroso y en la esquina de Manduvirá hay un pozo profundo lleno de agua.
En el mismo barrio hay otra calle desastrosa. Se llama Tajy, donde el Rubén Echagüe decidió reparar con sus propios recursos. Compró ripio y comenzó a esparcir en su cuadra.
En el mismo barrio hay otra calle desastrosa. Se llama Tajy, donde el Rubén Echagüe decidió reparar con sus propios recursos. Compró ripio y comenzó a esparcir en su cuadra.
“Acá en 14 años una vez ingresó el tractor municipal, luego nunca recibimos apoyo, por ello salí a repararla”, señaló Echagüe. Indicó que sus vecinos vieron como positivo el trabajo y ya le ofrecieron ayuda para seguir reparando la siguiente cuadra, a fin de evitar los accidentes que ya ocurrieron varias veces.
UH