Concepción.- La lista original de beneficiarios de las tierras de Antebi Cue, que data de 1998, cuenta con 476 nombres, de los cuales solo 53 continúan hoy en las colonias del Indert ocupadas actualmente por más de 1.500 supuestos beneficiarios de la reforma agraria, entre políticos, empresarios, ganaderos y hasta presuntos narcotraficantes. El Estado debe recuperar sus tierras.
ABC accedió de manera exclusiva a la lista original de beneficiarios de las tierras expropiadas en 1995 de la Compañía Inmobiliaria Paraguayo Argentina S.A. (CIPASA), propiedad de la familia Antebi.
El listado corresponde a las personas que hasta diciembre de 1998 fueron habilitadas por la gerencia de desarrollo del entonces Instituto de Bienestar Rural (IBR), para la asignación inicial de tierras dentro de Antebi Cue.
El registro censal en esa época se realizaba previa comprobación de la condición de beneficiario de la ley por parte del recurrente, con los documentos pertinentes y en coordinación con las comisiones vecinales.
Realizando un cruzamiento de datos entre dicho listado, que data de 1998, y el listado de beneficiarios presentado recientemente por el Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), que corresponde al censo del año 2005 y luego de 2011, se notan importantes diferencias.
Apenas 11%
Una de las diferencias notorias es la cantidad de personas que pertenecen a la lista original y que “sobreviven” en Antebi Cue.
En efecto, de las 476 personas que figuran en la lista original de beneficiarios (de 1998), apenas 53 personas integran la lista presentada recién por el Indert al presidente de la República, Fernando Lugo.
Es decir, que solo un 11% de los colonos que inicialmente ingresaron a Antebi Cue continúa hasta hoy día en esa zona.
Peor aun, si se tiene en cuenta la nueva lista presentada por el ente agrario, donde aparecen 1.540 lotes por igual cantidad de supuestos beneficiarios, el porcentaje de colonos originales que se encuentran hoy en tierras de Antebi Cue se reduce a apenas al 3,5%.
Solo lotes agrícolas
Es importante señalar que hasta 1998 se trabajó exclusivamente a nivel de familias rurales a ser asentadas en lotes agrícolas de explotación familiar. No se censó ni se habilitó entonces como beneficiario a ningún postulante a lotes agrosilvopastoriles ni ganaderos, que son los lotes que más hay en estos momentos en Antebi Cue.
De acuerdo al informe presentado por el Indert al Presidente de la República, en Antebi Cue existen hoy ocho colonias, de las cuales seis son agrosilvopastoriles y solo dos son colonias agrícolas.
Asimismo, de los 1.540 lotes que están registrados oficialmente por el Indert dentro de Antebi Cue, apenas 470 son lotes agrícolas y el resto, 1.070 son lotes agrosilvopastoriles, es decir, aptos solo para ganadería y actividades forestales.
Venta de derecheras
Si se tiene en cuenta que prácticamente el 90% de los beneficiarios originales de las tierras de Antebi Cue hoy ya no ocupa sus tierras, se deduce entonces que estas personas vendieron sus derecheras o certificados de ocupación, lo cual representa un ilícito según la Ley 1863/02 del Estatuto Agrario.
Asimismo, se debe investigar cómo accedieron a sus lotes las 1.500 personas que no figuran en el listado de beneficiarios originales, pero que poseen un lote dentro de las tierras de Antebi Cue, ya que la compra de derecheras también representa un acto ilícito.
Funcionarios involucrados
Además de la responsabilidad de las autoridades de turno tanto del ex IBR como del Indert, en las graves irregularidades que se cometieron en la ex CIPASA, se debe tener en cuenta la estrecha participación de funcionarios de las agencias departamentales del Indert, tanto del Amambay como de Concepción.
Los datos levantados en campo debían ser cruzados con los registros informatizados a nivel de las agencias departamentales y a nivel central, que contaban con una base de datos. Por lo tanto, los funcionarios deben responder por estos hechos.
El listado corresponde a las personas que hasta diciembre de 1998 fueron habilitadas por la gerencia de desarrollo del entonces Instituto de Bienestar Rural (IBR), para la asignación inicial de tierras dentro de Antebi Cue.
El registro censal en esa época se realizaba previa comprobación de la condición de beneficiario de la ley por parte del recurrente, con los documentos pertinentes y en coordinación con las comisiones vecinales.
Realizando un cruzamiento de datos entre dicho listado, que data de 1998, y el listado de beneficiarios presentado recientemente por el Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), que corresponde al censo del año 2005 y luego de 2011, se notan importantes diferencias.
Apenas 11%
Una de las diferencias notorias es la cantidad de personas que pertenecen a la lista original y que “sobreviven” en Antebi Cue.
En efecto, de las 476 personas que figuran en la lista original de beneficiarios (de 1998), apenas 53 personas integran la lista presentada recién por el Indert al presidente de la República, Fernando Lugo.
Es decir, que solo un 11% de los colonos que inicialmente ingresaron a Antebi Cue continúa hasta hoy día en esa zona.
Peor aun, si se tiene en cuenta la nueva lista presentada por el ente agrario, donde aparecen 1.540 lotes por igual cantidad de supuestos beneficiarios, el porcentaje de colonos originales que se encuentran hoy en tierras de Antebi Cue se reduce a apenas al 3,5%.
Solo lotes agrícolas
Es importante señalar que hasta 1998 se trabajó exclusivamente a nivel de familias rurales a ser asentadas en lotes agrícolas de explotación familiar. No se censó ni se habilitó entonces como beneficiario a ningún postulante a lotes agrosilvopastoriles ni ganaderos, que son los lotes que más hay en estos momentos en Antebi Cue.
De acuerdo al informe presentado por el Indert al Presidente de la República, en Antebi Cue existen hoy ocho colonias, de las cuales seis son agrosilvopastoriles y solo dos son colonias agrícolas.
Asimismo, de los 1.540 lotes que están registrados oficialmente por el Indert dentro de Antebi Cue, apenas 470 son lotes agrícolas y el resto, 1.070 son lotes agrosilvopastoriles, es decir, aptos solo para ganadería y actividades forestales.
Venta de derecheras
Si se tiene en cuenta que prácticamente el 90% de los beneficiarios originales de las tierras de Antebi Cue hoy ya no ocupa sus tierras, se deduce entonces que estas personas vendieron sus derecheras o certificados de ocupación, lo cual representa un ilícito según la Ley 1863/02 del Estatuto Agrario.
Asimismo, se debe investigar cómo accedieron a sus lotes las 1.500 personas que no figuran en el listado de beneficiarios originales, pero que poseen un lote dentro de las tierras de Antebi Cue, ya que la compra de derecheras también representa un acto ilícito.
Funcionarios involucrados
Además de la responsabilidad de las autoridades de turno tanto del ex IBR como del Indert, en las graves irregularidades que se cometieron en la ex CIPASA, se debe tener en cuenta la estrecha participación de funcionarios de las agencias departamentales del Indert, tanto del Amambay como de Concepción.
Los datos levantados en campo debían ser cruzados con los registros informatizados a nivel de las agencias departamentales y a nivel central, que contaban con una base de datos. Por lo tanto, los funcionarios deben responder por estos hechos.
¿QUIÉNES AUTORIZARON?
Hasta el año 1998, el ex Instituto de Bienestar Rural (IBR) trabajó exclusivamente con las familias rurales que serían asentadas en lotes agrícolas. No se censó ni se habilitó como beneficiario a ningún postulante a lotes agrosilvopastoriles ni ganaderos, según documentos de la Gerencia de Desarrollo. Se debe investigar pues cómo se ocuparon los más de 1.000 lotes agrosilvopastoriles que hoy figuran en los registros del Indert luego de los censos del 2005, 2008 y 2011. Quiénes autorizaron las ocupaciones, quiénes adjudicaron los lotes y sobre todo cuánto se cobró hasta ahora por los certificados de ocupación expedidos por el ente agrario en las costosas tierras de Antebi Cue.