Mencionan el paquete estructural deficiente, el excesivo tiempo que corrió entre la adjudicación y la orden de inicio del trabajo, así como el aumento del deterioro de la pista.
“Las ofertas de la licitación se presentaron el 11 de setiembre de 2008, resultando ganador el Consorcio Emcovi, con un precio de G. 131.996.294.502, equivalente a US$ 33.416.783 al tipo de cambio de esa fecha, de G. 3.950 por dólar”, indicó.
Expresó después que en fecha 16 de marzo de 2009, el MOPC y el consorcio Emcovi firmaron el contrato para la ejecución de la obra y la orden de inicio de la obra se impartió en fecha 21 de mayo de 2009. “Para entonces el proyecto con 2 años y medio de antigüedad ya no atendía las necesidades reales de reparación, por lo que el MOPC ordenó la ejecución de estudios de actualización de proyecto”, apuntó Ardissone.
“Las actualizaciones necesarias definidas por los mencionados estudios se incluyeron en el convenio modificatorio de obra Nº 1, aprobado el 19 de octubre de 2010 (1 año y 5 meses después), que elevó el monto del contrato a G. 158.363.125.321, equivalente a US$. 32.109.312 al tipo de cambio de esa fecha de G. 4.932 por dólar. Aquí se debe anotar que el incremento del monto contractual fue de 19,98% en la moneda local, y referenciando al dólar americano, disminuyó en -3,91%”, agregó.
“El incremento es razonable en vista a que los trabajos de reconstrucción se incrementaron de 29 kilómetros a 74 kilómetros, a que se incluyeron 11 kilómetros de recapado con concreto asfáltico y a que se disminuyeron en 56 kilómetros los trechos en mal estado para los que inicialmente solo se previó un retexturizado superficial”, justificó luego el ejecutivo de Tecnoedil.
“La demora en la toma de decisiones insume tiempo y el tiempo genera incremento en el deterioro de la ruta, y esto es sinónimo de mayores necesidades presupuestarias para la recuperación de la vía. Estudios de actualización del estado de los trechos remanentes a construir, conforme al estudio presentado por la firma consultora P&EE al MOPC el pasado 16 de marzo de 2011, indicaron nuevas necesidades”, señaló el técnico.
“Nosotros en nuestro carácter de empresas constructoras tenemos una responsabilidad muy limitada con la durabilidad de los trabajos que contrata el Estado. Como contratistas somos responsables de ejecutar con calidad el proyecto aprobado por el MOPC, y no así de la calidad del proyecto ejecutivo, y de los trabajos de mantenimiento de rutina”, concluyó diciendo.
A cargo de tres firmas
La obra en cuestión fue adjudicada al consorcio Emcovi, conformada por las constructoras Tecnoedil (Roque Ardissone), Benito Roggio e Hijos (Óscar Franco) y CCC (Solano Cordero). El gerenciamiento del trabajo es cuestionado por el sector de la construcción que señala que el presupuesto original se incrementó de forma considerable y critica que ahora el mencionado consorcio haya solicitado otro remanente de US$ 15 millones para completar el tramo faltante del trabajo. Es financiada con recursos del Focem y MOPC.
“Las ofertas de la licitación se presentaron el 11 de setiembre de 2008, resultando ganador el Consorcio Emcovi, con un precio de G. 131.996.294.502, equivalente a US$ 33.416.783 al tipo de cambio de esa fecha, de G. 3.950 por dólar”, indicó.
Expresó después que en fecha 16 de marzo de 2009, el MOPC y el consorcio Emcovi firmaron el contrato para la ejecución de la obra y la orden de inicio de la obra se impartió en fecha 21 de mayo de 2009. “Para entonces el proyecto con 2 años y medio de antigüedad ya no atendía las necesidades reales de reparación, por lo que el MOPC ordenó la ejecución de estudios de actualización de proyecto”, apuntó Ardissone.
“Las actualizaciones necesarias definidas por los mencionados estudios se incluyeron en el convenio modificatorio de obra Nº 1, aprobado el 19 de octubre de 2010 (1 año y 5 meses después), que elevó el monto del contrato a G. 158.363.125.321, equivalente a US$. 32.109.312 al tipo de cambio de esa fecha de G. 4.932 por dólar. Aquí se debe anotar que el incremento del monto contractual fue de 19,98% en la moneda local, y referenciando al dólar americano, disminuyó en -3,91%”, agregó.
“El incremento es razonable en vista a que los trabajos de reconstrucción se incrementaron de 29 kilómetros a 74 kilómetros, a que se incluyeron 11 kilómetros de recapado con concreto asfáltico y a que se disminuyeron en 56 kilómetros los trechos en mal estado para los que inicialmente solo se previó un retexturizado superficial”, justificó luego el ejecutivo de Tecnoedil.
“La demora en la toma de decisiones insume tiempo y el tiempo genera incremento en el deterioro de la ruta, y esto es sinónimo de mayores necesidades presupuestarias para la recuperación de la vía. Estudios de actualización del estado de los trechos remanentes a construir, conforme al estudio presentado por la firma consultora P&EE al MOPC el pasado 16 de marzo de 2011, indicaron nuevas necesidades”, señaló el técnico.
“Nosotros en nuestro carácter de empresas constructoras tenemos una responsabilidad muy limitada con la durabilidad de los trabajos que contrata el Estado. Como contratistas somos responsables de ejecutar con calidad el proyecto aprobado por el MOPC, y no así de la calidad del proyecto ejecutivo, y de los trabajos de mantenimiento de rutina”, concluyó diciendo.
A cargo de tres firmas
La obra en cuestión fue adjudicada al consorcio Emcovi, conformada por las constructoras Tecnoedil (Roque Ardissone), Benito Roggio e Hijos (Óscar Franco) y CCC (Solano Cordero). El gerenciamiento del trabajo es cuestionado por el sector de la construcción que señala que el presupuesto original se incrementó de forma considerable y critica que ahora el mencionado consorcio haya solicitado otro remanente de US$ 15 millones para completar el tramo faltante del trabajo. Es financiada con recursos del Focem y MOPC.
Fuente: ABC