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| Arroyo Paso Chimó, a cuya ribera se encuentra una curtiembre en Horqueta |
El arroyo Karê, del cual forman parte otros arroyos como Paso Chimó, Paso Baldo, Espajín y el de Capitán Sosa, está contaminado por desechos de curtiembres de los barrios Fátima y Las Mercedes, que se encuentran en la zona baja de esta ciudad.
Otro río afectado por la contaminación es el Aquidabán, en la zona de Paso Mbutú, lugar que dejó de utilizarse como balneario debido a que las personas que se lanzan a sus aguas posteriormente sufren de enfermedades de la piel y otras afecciones.
Pobladores de dicha localidad, ubicada a unos 30 kilómetros de esta ciudad, afirmaron que ganaderos brasileños de la zona echan en sus cauces los restos de animales faenados. El arroyo Espajín, ubicado en las periferias de la ciudad, también es contaminado por los desechos de la fábrica de aceites y jabones Indhor, empresa del grupo Whillerssin, debido a que la planta de tratamiento de la citada industria no es efectiva.
El arroyo está secándose por efecto de la colmatación causada por las erosiones de las lluvias, que llenan de arena sus cauces.
Para evitar que dichas fuentes desaparezcan, la comisión de aguas solicitó a la Secretaría del Ambiente (Seam) la ayuda correspondiente para la recuperación del arroyo Karê, que tiene una extensión de más de 40 kilómetros desde Paso Chimó hasta el río Ypané.
El supervisor regional del Servicio Nacional de Saneamiento Ambiental (Senasa), Lic. Marcos López Filártiga, quien también es jefe de la agrupación de Boys Scout Nº 29 Acosta Ñu, afirmó que en la actualidad es imposible realizar campamentos por la desaparición de bosques y la contaminación de los cursos hídricos.
Sostuvo que, además de los ríos de esta zona, el río Paraguay también es contaminado por desechos.
Dijo que los parlamentarios deben aprobar proyectos para recuperar y proteger los recursos naturales. “Es urgente que las autoridades apliquen las leyes ambientales para evitar la extinción de los arroyos, ríos y los últimos bosques del país”, concluyó.
Fuente: ABC
Otro río afectado por la contaminación es el Aquidabán, en la zona de Paso Mbutú, lugar que dejó de utilizarse como balneario debido a que las personas que se lanzan a sus aguas posteriormente sufren de enfermedades de la piel y otras afecciones.
Pobladores de dicha localidad, ubicada a unos 30 kilómetros de esta ciudad, afirmaron que ganaderos brasileños de la zona echan en sus cauces los restos de animales faenados. El arroyo Espajín, ubicado en las periferias de la ciudad, también es contaminado por los desechos de la fábrica de aceites y jabones Indhor, empresa del grupo Whillerssin, debido a que la planta de tratamiento de la citada industria no es efectiva.
El arroyo está secándose por efecto de la colmatación causada por las erosiones de las lluvias, que llenan de arena sus cauces.
Para evitar que dichas fuentes desaparezcan, la comisión de aguas solicitó a la Secretaría del Ambiente (Seam) la ayuda correspondiente para la recuperación del arroyo Karê, que tiene una extensión de más de 40 kilómetros desde Paso Chimó hasta el río Ypané.
El supervisor regional del Servicio Nacional de Saneamiento Ambiental (Senasa), Lic. Marcos López Filártiga, quien también es jefe de la agrupación de Boys Scout Nº 29 Acosta Ñu, afirmó que en la actualidad es imposible realizar campamentos por la desaparición de bosques y la contaminación de los cursos hídricos.
Sostuvo que, además de los ríos de esta zona, el río Paraguay también es contaminado por desechos.
Dijo que los parlamentarios deben aprobar proyectos para recuperar y proteger los recursos naturales. “Es urgente que las autoridades apliquen las leyes ambientales para evitar la extinción de los arroyos, ríos y los últimos bosques del país”, concluyó.
Fuente: ABC
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