2 may 2010
Asfaltado de ruta se iniciará en noviembre
En noviembre próximo comenzaría la construcción del asfaltado de la ruta Concepción-Vallemí, según anunció aquí el ministro de Obras Públicas y Comunicaciones, Efraín Alegre. Para junio se anuncia la reunión de cancilleres del Mercosur en donde se aprobarían la asistencia financiera de los Fondos Estructurales del Mercosur para la obra, en julio se llamará a licitación para adjudicar en setiembre y arrancar la tarea en noviembre, según explicó el titular del MOPC. En principio, la licitación se había anunciado para abril pasado pero se está retrasando creando preocupación en las autoridades y la población regional sobre la infraestructura. El anunció del ministro se produjo el miércoles pasado durante la visita del presidente Lugo a Concepción por cuestiones del estado de excepción vigente en el departamento. Alegre informó también sobre la adjudicación de trabajos de mejoramiento de la Ruta 3 Gral.
Elizardo Aquino y la Ruta 5 Gral. Bernardino Caballero, “tenemos resuelto las comunicaciones principales de Concepción en los próximos cinco años”, dijo.
Al referirse a la ruta a Vallemí, Alegre dijo que “estamos para financiar esa obra con los Fondos Estructurales del Mercosur, un recurso que está destinado para ayuda a los países del Mercosur”. “Estamos esperando la reunión de cancilleres, los cuatro cancilleres del Mercosur son los que tienen que aprobarnos la obra, ellos se reúnen en junio, así es que en el segundo semestre estamos licitando y estamos empezando la obra de este tramo tan importante, sin duda alguna la obra más importante que vamos a empezar este año a nivel nacional que es la de Concepción-Vallemí”, afirmó. El titular del MOPC calculó que “estaremos licitando en julio, lo que sí empezamos la obra en el segundo semestre”. “La licitación lleva un proceso, julio, agosto, setiembre estaríamos adjudicando y en noviembre tendríamos que estar en obra”, adelantó.
Terroristas ejecutaron a víctimas desde 5 metros
Fuentes policiales aseguraron que los disparos que mataron a las cuatro personas el pasado 21 de abril en Arroyito fueron realizados de, aproximadamente, cinco metros y las heridas que recibieron tanto los empleados de las estancias como el policía dan cuenta de que los miembros del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) dispararon cuando los hombres se bajaron de sus caballos y se disponían a ingresar al monte, desde donde los victimarios les tenían en la mira a unos 20 metros del campamento instalado por los terroristas.
Las víctimas fueron el suboficial ayudante Joaquín Agüero Benítez (26), del puesto policial del Núcleo 3 del asentamiento de Arroyito; Francisco Ramírez (35) y el brasileño Jair Ravello (35), capataz y peón de la estancia Guaraní, respectivamente, además de Osmar Valiente (49), brasileño, este último un peón de la estancia Santa Adelia.
Por otra parte, en la víspera, las fuerzas especiales que se encuentran trabajando en el Norte se tomaron un descanso y solo se trabajó en contados puestos de control sobre la ruta. Tanto militares como policías no realizaron ningún tipo de incursión, aunque todos se mantuvieron en sus respectivas bases.
En este momento, los trabajos de inteligencia por parte de agentes de Antisecuestros y de la Policía manejan datos importantes que los están cotejando para que, en los próximos días, se lleven adelante allanamientos y posibles detenciones de personas que podrían estar relacionadas al grupo armado.
A 10 días del asesinato de cuatro personas supuestamente en manos del EPP, la búsqueda de los insurgentes no arrojó resultado positivo, por lo que los intervinientes podrían, en los próximos días, cambiar de estrategia; una de ellas sería la de peinar toda la zona con apoyo aéreo, ingresar en los lugares donde se tiene información de que podrían estar ocultos, pero con apoyo aéreo. El objetivo es ingresar con, al menos, 200 hombres entre policías, militares y grupo de élite.
MOVIMIENTO.
Los investigadores manejan la información de que el grupo está en constante movimiento y no se queda en un lugar por más de 24 horas, pero no se aleja del área porque generalmente elige los lugares de difícil acceso para descansar.
Asimismo, se tiene la información de que los prófugos nunca se alejan del arroyo Kaygatá. Además, esta zona es bien conocida por ellos, por lo que es muy difícil llegar al lugar donde se esconden. Los investigadores señalaron que el grupo utiliza la noche para mudarse de un lugar a otro, inclusive contaría con equipo de visión nocturna.
Esta gente está entrenada para caminar sin pausa hasta ocho horas. Creen que el día de la matanza caminaron principalmente desde las 20 hasta las 4, y de esa manera pudieron alejarse de la zona del enfrentamiento, lo que impidió a los agentes de élite encontrarlos. Los grandes operativos solamente se centran en zona de Horqueta.
Nulos resultados a más de una semana de la declaración del estado de excepción
En la zona de Kurusu de Hierro (Concepción) y Tacuatí (San Pedro), donde el EPP ejerce dominio absoluto desde varios años, la presencia de militares es nula.
Incluso, en el destacamento militar de Tacuatí prácticamente no hay uniformados asignados a la ejecución del operativo conjunto “Py’aguapy”, desplegado en el marco del estado de excepción que rige tras el asesinato de un capataz, dos peones y un policía, en la estancia “Santa Adelia” de Arroyito, en manos de militantes del grupo armado.
Los efectivos castrenses se encuentran integrados a la misión hasta ahora en carácter de “apoyo” para los policías. Solo efectúan controles en “puntos estratégicos” como los cascos urbanos de las ciudades más importantes del primer departamento.
Sin embargo, otros puntos conflictivos de zonas rurales están descuidadas por las fuerzas conjuntas.
En Kurusu de Hierro, por ejemplo, agentes de la comisaría 21ª hacen controles aleatorios durante todo el día, sin el apoyo militar. La zona es considerada como uno de los bastiones del EPP, liderado por Osvaldo Villalba. Uno de los detenidos por el caso Lindstron, Antonio Ramón Bernal, es oriundo de la localidad.
En Tacuatí, en cambio, un retén se montó en la entrada al distrito a cargo de agentes de la comisaría 10ª. Sin embargo, la cantidad de militares que apoya el servicio de barrera es insuficiente. Algunos pobladores dijeron que el ganadero Luis Lindstron, quien fue secuestrado por el EPP, a menudo se queja del escaso despliegue militar y la limitada seguridad en la zona.
Cómo funciona la ofensiva militar de Lugo para capturar a guerrilleros
Deben estar buscando fantasmas. O a "Jasy Jatere", un genio, el Cupido
guaraní, que con una varita mágica puede volverse invisible. Porque los
tres pelotones de 15 policías cada uno de las fuerzas de elite recorren
el monte y no encuentran a nadie.
Ni a un sólo poblador y, mucho menos,
a alguno de los miembros del autodenominado Ejército del Pueblo
Paraguayo (EPP), un grupo guerrillero que tiene en vilo a los paraguayos
y por el cual el presidente Fernando Lugo ordenó hace una semana el
Estado de excepción en cinco departamentos y movilizar a 3.300 militares
y policías para dar con ellos.
El monte es tupido, cubierto de palmeras, cedros, palo santo, incienso,
yerba mate y sésamo. Y unos enormes hormigueros de tierra rojiza, que
superan el metro y medio de altura y diámetro. Entre los pajonales,
apenas se distingue el uniforme color caqui de la fuerza de elite,
armada con fusiles M15 y M16, cuchillos y pistolas. A unos 25 kilómetros
de la ruta, está el arroyo Cagatá. "Vamos a hacer un recorrido por su
orilla, porque seguro que 'estos' usan los ríos para movilizarse. Así no
dejan rastros", dice a Clarín un policía, que no da su nombre y que
-como sus compañeros-- no lleva identificación, pero que están al mando
del comisario principal Carlos Aguilera, jefe policial de Concepción.
"No puedo hablar", dice. "El único que puede hacerlo es el general
Néstor Quiñones, a cargo del operativo", agrega, algo molesto. No es
posible seguirlos. Regresan dos horas después, exhaustos y con las manos
vacías. "Nada", dice uno de ellos, como si hiciera falta aclarar que no
hubo arrestos.
El epicentro de la búsqueda es Arroyito, un caserío a 80 kilómetros de
Concepción, al costado de la ruta que lleva a Asunción, a casi 500
kilómetros de la capital paraguaya. Concepción es la capital de uno de
los cinco departamentos bajo el Estado de excepción. Allí, el 21 de
abril pasado, un grupo de unos 10 miembros del EPP mató a cuatro
guardias privados de seguridad de una estancia, a la que llegaron con la
intención de secuestrar a su dueño. No lo lograron. Pero consiguieron
que todas las fuerzas de seguridad paraguayas estén tras sus pasos, en
un operativo que el gobierno admitió que costará por 30 días unos
850.000 dólares.
Mientras la policía se mete al monte, el ejército movilizado por Lugo
cumple tareas más bien burocráticas, porque aún no recibió la orden de
largarse tierra adentro a la caza del EPP: a lo largo de 100 kms de la
ruta, al menos 5 retenes militares piden documentos, revisan autos y
camiones y toman tereré bajo la sombra frondosa de algún árbol. "Primero
haremos inteligencia, luego actuaremos", dice a Clarín una fuente militar.
Pero de pronto, en la rotonda de entrada a Concepción -con sus 80.000
almas tomando el descanso de la una de la tarde-- soldados del
Regimiento de Infantería 10 Sauce pelean a brazo partido. Son cinco
contra uno. Hay gritos, miradas de asombro por ese combate callejero
bajo un cielo plomizo. Finalmente, la superioridad numérica puede más
que la fuerza bruta de un cebú que insistía en echarse sobre el asfalto,
a hacer su siesta. Lo atan con una soga a un poste de la luz. Queda
arrestado.
Encarnación tiene la piel blanca como la leche. Está sentada en un
sillón como de antigua peluquería en la puerta de un salón de belleza
-debe llamarse "Katy"--, sobre una de las calles laterales del Mercado
Municipal. Debe andar por los 75 años y se está haciendo depilar las
cejas. Encarnación odia a Lugo tanto como al EPP: "¿Cómo le parece a
usted que va a andar dejando hijos por ahí, siendo obispo?", dice y no
llega a persignarse. "A esos hay que meterles bala, como hacía
Stroessner, para que vuelva la tranquilidad", agrega. Operativo "Py
Aguapy" (tranquilidad en guaraní) se llama,|precisamente, la operación
lanzada por Lugo.
Los que no están tranquilos son los ganaderos dueños de millonarias
haciendas y los campesinos, pobres y olvidados, en esta zona en la que
no existe el Estado, y mucho menos educación, salud o viviendas dignas
para ellos, "tierra fértil" para que prenda el discurso "revolucionario"
del EPP. Y "tierra fértil", también, para que salgan a la caza de algún
rico hacendado, en la región ganadera por excelencia del país. El 17 de
enero, el EPP liberó al ganadero Fidel Zavala, luego de que la familia
pagara un rescate de unos 500.000 dólares y repartiera carne para
sectores marginados de Asunción, tras 94 días de cautiverio. Había sido
secuestrado en su estancia, Rancho Z, a unos 70 km de Concepción, por un
grupo comando, al parecer los mismos hombres que forman la "comandancia"
del EPP. Y el 31 de julio de 2008, secuestraron al ganadero Luis
Lindstron y lo liberaron el 12 de septiembre de ese año tras el pago de
300.000 dólares.
José Galeano es el presidente de la Asociación Rural de Concepción y
recibe a Clarín en su estancia, de más de 1.000 hectáreas, ubicada en
Horqueta, 40 kilómetros al norte de esta ciudad. Tiene miedo y se nota.
"Estamos con temor porque no se ve voluntad política para solucionar
este problema. Nosotros apoyamos el Estado de excepción, pero el
ejército debe entrar al monte, no quedarse en las rutas", dice este
hombre de hablar pausado, vestido con una remera y botas de monte.
Representa a 170 grandes ganaderos de la región, propietarios de
estancias que llegan a las 20.000 hectáreas. Cada hectárea cuesta entre
500 y 700 dólares.
-¿Y no tienen guardias de seguridad privados?, pregunta Clarín.
--No sirve de mucho, porque el EPP está bien entrenado, conocen el monte
y tienen mejores armas que la Policía. Además, deben contar con el apoyo
de campesinos, que los protegen o al menos no los denuncian si los ven.
Paraguay figura entre los países con peor distribución de la riqueza de
la región: el 20% más rico concentra el 62,4% de los ingresos y el 10%
más pobre apenas el 0,7%. Según el gobierno paraguayo, el 40% de los
siete millones de habitantes son pobres, pero para la CEPAL esa cifra
trepa al 50%. Y los campesinos figuran al tope, en un país en el que la
población rural es casi la mitad del total. En esta región, un jornalero
cobra por día unos 7,5 dólares, cuando el salario mínimo es de poco más
de 300 dólares. Y apenas tienen el 15% de las 600.000 hectáreas aptas
para la ganadería que hay en la región.
La Organización Campesina del Norte estuvo en el centro del huracán
porque algunos de sus miembros fueron arrestados o están prófugos por
vínculos con el EPP. Isidoro Bazán es su presidente y representa a 1.200
asociados que en promedio tienen una pequeña chacra de 5 hectáreas. "El
problema es que ahora los campesinos somos sospechosos de todo y la
policía y los militares nos acosan", dice a Clarín en la sede de la
organización, unos kilómetros al norte de Concepción, una casa con
galpón y paredes húmedas, en donde sobresale una pintura del Che.
"Nosotros no tenemos nada que ver con el EPP, no creemos que haya
condiciones para la lucha armada en Paraguay. A los que tuvieron o
tienen vínculos con ellos, los hemos expulsado", dice este campesino,
alto, flaco, que habla más en guaraní que en español. Bazán sospecha que
el EPP tiene vínculos con los narcos --esta es una región en donde hay
miles de hectáreas sembradas de marihuana-- sobre todo provenientes de
Brasil, una frontera caliente a unos 200 kilómetros de aquí. "El miedo
ahora --dice-- es que si el gobierno no los atrapa, los hacendados
formen grupos de paramilitares, como pasó en Colombia. Y eso será muy
grave para nosotros", explica.
A las seis de la tarde oscurece en Concepción. El río Paraguay se vuelve
marrón oscuro y la mayoría de los negocios baja sus persianas. Es la
hora en que la Universidad del Norte abre sus puertas. Ubicada en la
esquina de Presidente Franco y Carlos López, la universidad es un
hervidero de estudiantes. Como la mayoría de los habitantes de esta
ciudad, hablan poco del EPP y dudan de que los puedan atrapar. Y hasta
hacen chistes: "Seguro que no los atrapan, porque alguno debe ser hijo
de Lugo no reconocido", dice uno de ellos, recordando que algunos
miembros de EPP fueron miembros de Patria Libre, un partido que apoyó al
presidente para las elecciones y que Manuel Cristaldo Mieres y Magna
Meza, ambos prófugos en el monte, fueron monaguillos de Lugo, cuando
éste era obispo de San Pedro.
En esa esquina hay, también, dos parejas de turistas canadienses con sus
mochilas y su infaltable botella de agua. "¿'Guerila' por acá?",
pregunta uno asombrado cuando Clarín comenta el tema. "No hemos visto",
agrega. La policía y el ejército, todavía tampoco, pero que los hay, los
hay. Debe ser que buscan a fantasmas o al invisible "Jasy Jatere".
1 may 2010
Nulos resultados a más de una semana de la declaración del estado de excepción
Pese a que el estado de excepción rige en cinco departamentos del país y que Concepción es la zona más asediada por el EPP, las fuerzas conjuntas solo sitiaron los alrededores de donde se produjo la matanza de cuatro trabajadores, entre ellos un policía, en Arroyito.
En la zona de Kurusu de Hierro (Concepción) y Tacuatí (San Pedro), donde el EPP ejerce dominio absoluto desde varios años, la presencia de militares es nula.
Incluso, en el destacamento militar de Tacuatí prácticamente no hay uniformados asignados a la ejecución del operativo conjunto “Py’aguapy”, desplegado en el marco del estado de excepción que rige tras el asesinato de un capataz, dos peones y un policía, en la estancia “Santa Adelia” de Arroyito, en manos de militantes del grupo armado.
Los efectivos castrenses se encuentran integrados a la misión hasta ahora en carácter de “apoyo” para los policías. Solo efectúan controles en “puntos estratégicos” como los cascos urbanos de las ciudades más importantes del primer departamento.
Sin embargo, otros puntos conflictivos de zonas rurales están descuidadas por las fuerzas conjuntas.
En Kurusu de Hierro, por ejemplo, agentes de la comisaría 21ª hacen controles aleatorios durante todo el día, sin el apoyo militar. La zona es considerada como uno de los bastiones del EPP, liderado por Osvaldo Villalba. Uno de los detenidos por el caso Lindstron, Antonio Ramón Bernal, es oriundo de la localidad.
En Tacuatí, en cambio, un retén se montó en la entrada al distrito a cargo de agentes de la comisaría 10ª. Sin embargo, la cantidad de militares que apoya el servicio de barrera es insuficiente. Algunos pobladores dijeron que el ganadero Luis Lindstron, quien fue secuestrado por el EPP, a menudo se queja del escaso despliegue militar y la limitada seguridad en la zona.
Continúa malestar entre militares y policías en el Norte
Uniformados abocados al operativo Py'aguapy nuevamente tienen disparidad de criterios en diversos puntos. Los militares se moles- taron por el plus que cobran policías en el operativo.
Es bien sabido la crispación que existe en los diferentes trabajos conjuntos que realizan militares y policías. El operativo de seguridad llevado a cabo en el marco del estado de excepción que rige en 5 departamentos del país no es la excepción.Ayer trascendieron diferentes situaciones que ponen en jaque a los altos mandos militares y acrecientan las diferencias entre policías y miembros de las FFAA abocados a la búsqueda de integrantes del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
PLUS.
El nuevo foco de conflicto se abre a raíz de que al parecer varios militares asignados a las tareas conjuntas en el interior del país estarían molestos debido a que el Ministerio del Interior decidió dar un plus a los policías en concepto de "riesgo de vida".
La diferenciación que se hace en este tipo de operativos es tomada por los uniformados como una injusticia.
Varios militares que se encuentran abocados al operativo en el Norte han denunciado este hecho.
Asimismo, existe crispación en ambas esferas por las tácticas empleadas para capturar a los miembros del EPP.
Por un lado, los militares sólo se limitan a realizar controles en rutas y caminos rurales, mientras que los efectivos de la Policía realizan "el trabajo sucio" ingresando a los montes y a las espesuras.
CON CUIDADO.
El coronel Cayo Arréllaga, vocero del operativo conjunto Py'aguapy, expresó ayer que las operaciones en el Norte se realizan en forma conjunta y sin ningún tipo de problemas.
Aseveró que aguardan la autorización del Servicio de Inteligencia para que los militares incursionen en los bosques, ya que se está planificando y cuidando todos los detalles.
"El operativo requiere de un planeamiento delicado y estamos trabajando con todos los componentes de las fuerzas públicas con el procesamiento debido, con mucha cautela del personal de inteligencia, y cuando tengamos la posibilidad de que la acción militar va a tener éxito se va a realizar", sostuvo.
CONFUSIÓN.
Fuentes militares expresaron ayer que la incursión a las zonas boscosas corren a cuenta de los efectivos policiales.
La misión principal de los militares es ser una especie de retaguardia para la Policía.
Sin embargo, dentro de las esferas castrenses se considera un exabrupto la declaración del estado de excepción por parte del Gobierno, pues la situación que se presenta es muy singular.
Esto teniendo en cuenta que muchos jefes militares están preocupados porque no existe una orden escrita o una reglamentación del estado de excepción por parte del jefe de Estado.
Incluso se teme que con esta ley, muchos uniformados sean denunciados por violación a los derechos humanos y luego sean condenados.
Hasta ahora, los policías siguen aguardando el respaldo de los militares para efectuar incursiones conjuntas en busca de los secuestradores del EPP.
Arréllaga mencionó sobre el punto que se tienen todas las documentaciones sobre el punto y que el estado de excepción faculta a los militares accionar.
"Al personal se le capacita y se le entrena en derechos humanos, así es que no hay que preocuparse", acotó.
Trajo a colación que para el operativo conjunto se destinó alrededor de 500 hombres pertenecientes a la tropa de élite de las FFAA.
Asimismo el Comando Operacional Conjunto hizo un llamado a la población para colaborar en todo sentido.
En otro orden de cosas, para este fin de semana se tiene previsto que el general Bartolomé Pineda, comandante del Ejército y jefe de operaciones conjuntas en el Norte brinde una conferencia de prensa para informar sobre el operativo.
Aproximadamente 3 mil militares están abocados a las tareas con 300 policías.
30 abr 2010
Orquesta de Camara de Concepción en Dorados
A invitación de
La nueva camada de integrantes de
En la ocasión
Cabe comentar que la mayoría de los concepcioneros y paraguayos dejaron la patria fuera de su voluntad, algunos por motivos políticos y otros en busca de un mañana mejor.
Esta es la segunda presentación internacional de la joven orquesta de cámara que ya en el mes de diciembre del año pasado participó del Festival Infantil de Orquestas en Posadas (Argentina) organizada por los Grillitos Sinfónicos, la delegación incluye a 28 niños que oscilan entre
En Yby Yaú preocupa reinado de inseguridad
Yby Yaú es una ciudad con mucha influencia fronteriza. A la violencia que siempre rige, ahora se suma la presencia del EPP en la zona, hecho que preocupa a sus autoridades. Lugo visitará la próxima semana.
A los muchos crímenes ocurridos en este distrito y que tienen tinte de ajustes entre narcotraficantes, ahora se suma la presencia del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Este hecho preocupa a las autoridades de la zona y exigirán la presencia permanente de militares.
Para el intendente de Yby Yaú, Alcimio Casco, la preocupación aumenta, ya que se ha notado últimamente la presencia del EPP a pocos kilómetros de la ciudad.
Indicó que la militarización permanente sería una solución y que tal planteamiento harán al presidente, en su próxima visita.
En cuanto a los responsables de los crímenes ocurridos en la zona, no descarta que sean los narcotraficantes; aunque dejó en claro que los investigadores los deben esclarecer. "Yo no puedo decir quiénes son los responsables de los crímenes, creo que los investigadores deben decir eso, aunque no se descarta nada", agregó Casco.
Para el miércoles de la próxima semana, se anuncia la presencia de Fernando Lugo en la comunidad de Yby Yaú, distante a 109 km de Concepción y a 100 km de Pedro Juan Caballero.
Los temas a ser abordados son la violencia y la inseguridad reinantes en la zona, según explicó el mismo jefe de Estado durante su presencia esta semana en Concepción.
Yby Yaú es el distrito concepcionero que se halla fuertemente influenciado por la cultura fronteriza. Incluso, es la zona donde se concentran los narcotraficantes, tales como Jarvis Chimenes Pavao y Luiz Carlos Da Rocha (Cabeza Branca), este ultimo aún prófugo de la Justicia.
Varios fueron los hechos de crímenes ocurridos en esta ciudad, pero casi ninguno fue aclarado. Esta semana, de nuevo aparecieron dos cadáveres y se ha denunciado la presencia de personas armadas en una estancia cercana, presumiéndose que se tratan de miembros del EPP.
Existen dudas sobre hora de enfrentamiento en Arroyito
El estado de rigidez cadavérica en que se encontraban los cuerpos de las personas asesinadas el pasado 21 de abril en Arroyito genera dudas sobre la hora en que ocurrieron los hechos. Llevaban muertos entre 8 y 12 horas, respondió ayer el médico forense de la fiscalía de Concepción, Oscar Mieres, al referirse a los fallecidos.
La fiscalía se negó a mostrar el informe del profesional. Apenas admitió revelar las causas de muerte.
“Tenían rigidez cadavérica, eso significa que llevaban muertos entre 8 y 10 horas”, respondió el forense Oscar Mieres al ser consultado ayer por nuestro diario. Las dudas surgieron debido al estado de rigidez cadavérica en que se encontraban los cuerpos (un policía y tres guardias del establecimiento Santa Adelia) y un caballo, muertos en la refriega.
Las informaciones oficiales aseguraban que el hecho ocurrió cerca de las 8:00, a cinco kilómetros del casco principal del establecimiento mencionado, ubicado en el asentamiento de Arroyito, a unos 70 kilómetros de la ciudad de Horqueta, y a más de 300 kilómetros al norte de Asunción.
Hubo testigos directos de los hechos: Lucio Arce (35), quien sufrió un refilón de un tiro de arma de fuego a la altura de la cabeza; Juan Valiente (26) y Alcides Agüero (18). Sin embargo, curiosamente ninguno de ellos quiso dar declaraciones a la prensa, supuestamente por temor, pero aseguraron que el hecho ocurrió cerca de las 8:00.
El forense Mieres llegó al lugar poco después de las 9:00, según indicó. Si se tiene en cuenta el informe oficial, tardó poco más de 1 hora en hacerse presente. Sin embargo, cuando inspeccionó los cuerpos encontró que estos estaban con rigidez cadavérica. Al ser consultado después de cuántas horas de muerto el cuerpo adopta esa posición, aseguró que es entre 8 y 12 horas.
Ayer tratamos de acceder al informe forense que fue agregado a la carpeta del Ministerio Público. Sin embargo, Hugo Paredes, el asistente de la fiscala Dora Irrazábal, dijo que no estaba autorizado a mostrar el informe, ni siquiera dejar que se tomaran fotos del texto.
Dijo que solo podía revelar la parte donde refiere al diagnóstico del fallecimiento, elaborado por Mieres y que indica: Francisco Ramírez Benítez, paraguayo, casado (32 años), falleció de un traumatismo de cráneo encefálico por múltiples heridas de armas de grueso calibre. El citado era uno de los peones de la estancia Santa Adelia. El agente policial, Joaquín Agüero, paraguayo, soltero (26 años), perdió la vida de una herida de arma de fuego con orificio de entrada en la región posterior lateral del hemitórax izquierdo. Jair Rabello, brasileño, casado (35 años), guardia de la estancia, falleció de un traumatismo de cráneo encefálico por herida de arma de fuego y de shock hipovolémico; Osmar Da Silva de Souza, brasileño, casado (49 años), traumatismo de cráneo encefálico y también de shock hipovolémico por múltiples heridas de armas de fuego.
La autoría fue adjudicada a miembros del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), un grupo de criminales que lleva cometidos en el país al menos cuatro secuestros extorsivos.
Los policías incursionan, no asi los militares
Fuerzas especiales de la Policía que participan del operativo “Py’aguapy”, en el marco del estado de excepción que rige en cinco departamentos del país, incursionaron ayer en los montes de Arroyito, distrito de Horqueta, en busca de los miembros del EPP, quienes acribillaron en la zona a cuatro trabajadores hace una semana. Los militares se limitan a efectuar controles. Tres pelotones de efectivos de las fuerzas de élite de la Policía incursionaron ayer en los montes que rodean a la estancia “Santa Adelia” de Arroyito y el campamento abandonado por los militantes del Ejército del Pueblo Paraguayo.
En la zona, los guerrilleros acribillaron con armas de grueso calibre el miércoles 21 de abril a un capataz, dos peones y a un efectivo policial.
Cerca de 45 efectivos recorrieron los alrededores del establecimiento ganadero siguiendo el cauce del arroyo Cagatá, la misma ruta de escape que se presume utilizaron los miembros del grupo subversivo tras perpetrar el asesinato de los cuatro trabajadores.
Los uniformados verificaron además algunos retiros abandonados por peones de las haciendas de la zona, quienes según las fuentes huyeron por miedo.
Las incursiones fueron encabezadas por el jefe de Policía de Concepción, Crio. Princ. Carlos Humberto Aguilera, y el jefe del departamento Antisecuestro, Crio. Princ. Aldo Pastore.
Las fuerzas especiales de la Policía sin embargo no hallaron indicios que hagan sospechar que los militantes de la banda de secuestradores se encuentren cerca.
A partir de ahora, se anuncian incursiones más frecuentes de la Policía en los montes de Arroyito, área dominada por los guerrilleros. Se intenta cercar a los secuestradores en su terreno.
Solo acompañan
Pese a que el mismo Presidente de la República dijo el miércoles último durante una visita a Concepción que los militares son los que comandan la misión conjunta, hasta ahora los efectivos castrenses afectados a los operativos solo se limitan a efectuar controles en rutas y caminos rurales del primer departamento.
Varios militares fuertemente armados se encuentran apostados en “puntos estratégicos” del Norte, pero más que ejercer presión a los secuestradores se hallan abocados a controlar los documentos de transeúntes.
Hasta ahora, los policías siguen aguardando el respaldo de los militares para efectuar incursiones conjuntas en busca de los secuestradores del EPP.
28 abr 2010
Triplican números de militares para los operativos en el Norte del país
(LN)
En un principio estaban previstos 1.141, y ahora son 3 mil hombres de las FFAA y 300 policías.
La Operación Conjunta “Py’aguapy”, comandada por el general Bartolomé Ramón Pineda Ortiz, decidió triplicar la cantidad de efectivos militares que entrarán a operar dentro del estado de excepción decretado en los departamentos de Alto Paraguay, Presidente Hayes, Concepción, Amambay y San Pedro.
Casualmente horas después del atentado que sufrió el senador liberal Roberto Acevedo en el departamento de Amambay, en donde también rige el estado de excepción, la dirección de Asuntos Civiles del Comando de Operaciones informó a través de un comunicado que la Fuerza de Tarea Conjunta estará integrada ahora con 3.300 hombres (3 mil militares y 300 policías). Inicialmente comenzó el operativo con 1.141 efectivos. Este hecho es inédito teniendo en cuenta que es la primera vez que se moviliza tanta cantidad de efectivos militares en tiempo de paz.
“La Fuerza de Tarea Conjunta está conformada por personal del Ejército, de la Armada, de la Fuerza Aérea, de la Policía Nacional, del Comando Logístico, del Batallón Conjunto de Fuerzas Especiales, de las Tropas Especiales del Ejército y del Batallón “Mariscal Francisco Solano López”, alcanzando un efectivo total aproximado de 3.300 (tres mil trescientos) hombres”, señala el comunicado firmado por el coronel Cayo Rafael Arréllaga Ibarra.
El informe indica también que “se recomienda a las personas de los departamentos afectados por el estado de excepción, munirse de sus respectivas cédulas de identidad civil al salir de sus domicilios, como asimismo, de los documentos de los vehículos automotores que circularen por la zona”.
El informe indica además que el comandante de las Fuerzas Militares, general Juan Óscar Velásquez, ha designado como comandante de la Fuerza Tarea Conjunta de la Región Occidental, al general Darío Cáceres. Mientras que como comandante de la Fuerza Tarea Conjunta de la Región Oriental fue designado el general Néstor Quiñónez Delgado.
Por su parte, la comandancia de la Policía Nacional en la resolución Nº 407 dispone el nombramiento para apoyar a la Operación Conjunta “Py’aguapy” a los siguientes comisarios: Victorino Martínez como Director General de Servicio para coordinar con el Estado Mayor de la Operación Conjunta; al comisario César Herebia Sanabria como Director de Servicio para coordinar en la Región Occidental, y al comisario Cecilio Acosta como Director de Servicio para coordinar en la Región Oriental.
Retraso en la incursión de los militares favorece a los del EPP
A ocho días del asesinato de un suboficial de Policía, un capataz y dos peones de estancia en Arroyito, distrito de Horqueta, las fuerzas de seguridad prácticamente perdieron las pistas sobre el paradero de los miembros del EPP. La salida de los militares a las calles no arroja resultado positivo, principalmente porque no realizan incursiones en los montes, donde se ocultarían los criminales.
Desde la madrugada del martes último, decenas de efectivos militares se instalaron en distintos puntos del 1er. departamento, donde verificaron documentos de vehículos y personas. Varios camiones y camionetas de las FF.AA. se movilizaron, al igual que helicópteros, para trasladar tropas. Sin embargo, hasta ayer los efectivos castrenses colaboraron muy poco en la búsqueda de los miembros del EPP, quienes asesinaron al suboficial ayudante de policía Joaquín Agüero Benítez (26) y a los empleados de estancias Jair Rabello (35), Francisco Ramírez (32) y Osmar fa Silva de Souza (49), en un ataque a tiros ocurrido en la mañana del miércoles 21 de abril último dentro de la hacienda “Santa Adelia” del asentamiento Núcleo 3 de Arroyito. Las fuerzas especiales de la Policía, que al día siguiente del cuádruple homicidio habían encontrado el campamento de los integrantes del grupo armado en el citado asentamiento, siguen con las incursiones en los sitios despoblados, pero prácticamente abandonaron la búsqueda de los criminales en los montes. Fuentes policiales señalaron que aguardan a los militares para realizar esa tarea. Pero los miembros de las FF.AA. tampoco ingresan a los montes donde los investigadores sospechan que están ocultos los responsables de varios secuestros y asesinatos en nuestro país. Se mantienen sobre las principales rutas y calles del departamento de Concepción, por donde difícilmente circularían los miembros del grupo armado, según fuentes de inteligencia de la Policía.
Los agentes encargados de la investigación para capturar a los del EPP indicaron que estos tuvieron suficiente tiempo para trasladarse a otro sector del país, ya que hay una tardía reacción de los responsables de la seguridad en el país.
27 abr 2010
Un museo particular honra a musicos
Debido a su afición por la música paraguaya, César Rojas Sosa, dueño del museo privado Luis Alberto del Paraná, colecciona instrumentos musicales, ropas y otros enseres de los artistas.
Guitarras, charangos, discos de vinilo, camisas, zapatos, batutas, fotografías y otros objetos de músicos y personalidades de la cultura tienen un espacio en el museo particular de César Chango Rojas Sosa, también propietario de la radio Guyrá Campana, de Horqueta.El acervo del espacio creció gracias a las donaciones de artistas, así como de familiares y amigos de éstos. Hoy, el sitio posee imágenes de Luis Alberto del Paraná y otros objetos que pertenecieron al músico o a los integrantes de sus conjuntos.
"Legar un patrimonio cultural a la posteridad" es el principal deseo de Rojas al crear este museo.
El lugar forma parte del complejo cultural de la radio Guyrá Campana, en el cual funciona el Teatro Agustín Barboza, que recibe a los artistas durante los festivales públicos.
PRENDA.
Un interesante recuerdo de la película La burrerita de Ypacaraí -de 1962 y protagonizada por Isabel Sarli- fue a parar a los exhibidores de la colección norteña.
"Hay una camisa blanca, con bordados, utilizada por Luis Alberto del Paraná en el filme La burrerita de Ypacaraí. Esta prenda llegó al museo gracias al guitarrista horqueteño Papilín Ayala, director de Los barbos", reveló César Rojas.
Explica que Ayala recibió personalmente la ropa de Luis Alberto del Paraná de mano de uno de sus hermanos.
"En la clausura de un festival, realizado años atrás en Horqueta, Papilín me entregó el atuendo de Paraná", recuerda Rojas, quien guarda fotografías y discos de este artista.
COLECCIÓN.
El museo también resguarda varios instrumentos. "Tengo una guitarra del maestro Patiño, un guitarrista concepcionero que acompañaba a Emiliano R. Fernández", cuenta Rojas.
Otra de las piezas del museo es la faja de Adrián Barreto, un músico oriundo de Concepción que integró el conjunto de Paraná por varios años.
También llama la atención un lustroso par de zapatos. "Se trata de las botas del músico Agustín Barboza, donadas por su viuda Yverá, durante un acto solemne, en el marco de un festival", rememora el dueño del acervo.
El humor de Los Compadres no quedó en el olvido, ya que el sitio también incluye prendas de César Álvarez Blanco y Rafael Rojas Doria.
"Tengo objetos de mi amigo Amado del Paraguay, como una camisa y un lente de sol que me obsequió", relata.
En una de las paredes está colgada la guitarra del cantautor horqueteño Chiquín Barreto. "Hay fotos de Julio Jara, el guitarrista de Paraná, cuando visitó el museo", comenta.
Luis Szarán también se mostró dadivoso, ya que regaló una de sus batutas de director. "A veces les pido a los artistas que donen alguna pieza. Varios músicos también me prometieron que, cuando mueran, legarán sus objetos al museo", dice Rojas. Su dueño fundó el museo con el fin de que "las generaciones venideras conozcan el nombre de los cultores de la patria, en el ámbito del arte y la cultura".
Asesinan a dos en Yby Yaú
Esta madrugada vecinos de la colonia Ñepytyvó, jurisdicción de Yby Yaú denunciaron a la Policía, haber escuchado disparos de armas de fuego. Luego de una minuciosa revisión en la zona, la policía halló dos cadáveres, de quienes resultaron ser dos primos hermanos, quienes contaban con frondosos antecedentes por hechos delictivos y tenían órdenes de detención.
Aproximadamente a las 02:00 horas, se produjeron los disparos que acabaron con la vida de Domingo Achar, alías “Mingo”, con 22 años, y también Brígido Achar, alías “Pico”, quien contaba también con 22 años.
Ambos fueron ejecutados debido a que todos los disparos recibieron en la zona de la espalda, según el informe proporcionado a la radio 780 AM.
Uno de los malvivientes asesinados tenía guardado un pasamontañas.
En principio se manejaba la hipótesis de que ambos individuos participaron del fallido plan de ejecución del senador liberal de Pedro Juan Caballero Roberto Acevedo, y que debido a esta situación fueron ejecutados.
Sin embargo la policía aún trabaja para esclarecer ambos casos, pues de igual forma en la capital del Amambay siguen arrestados dos brasileños, quienes también estarían implicados en el caso del atentado en contra del senador Acevedo.
Denuncian a concejal de Horqueta por agresión
Barreto comentó que aproximadamente a las 20:30 del domingo último, el titular de la Junta llegó a la terminal y sin mediar palabra alguna lo agarró del cuello, lo llevó hasta una de las dependencias de la agencia y lo golpeó contra los vidrios de la puerta, que quedaron rotos. Señaló que felizmente no sufrió herida alguna ante el comportamiento del citado político, quien se encontraba en estado etílico.
Explicó que reaccionó de esa manera porque antes, Diana Riveros, hermana del edil quien había reservado un pasaje, llegó a la terminal para viajar a la capital en uno de los coches de la empresa Nasa. Dijo que cuando le solicitó pagar por el costo del pasaje, esta le respondió que su hermano (presidente de la Junta) ya había pagado por el boleto.
“Yo le respondí que aun no, entonces ella pagó y se comunicó telefónicamente con alguien, no se con quién y cuando partió el vehículo vino llegando su hermano, quien me agredió de esa manera”, indicó.
No supo explicar cuáles serían los motivos, y otras fuentes señalan que Riveros quería aprovecharse de un peaje que pagan las empresas por utilizar las oficinas de la terminal como agencias para no pagar por el pasaje.
Ayer intentamos obtener la versión del titular de la Junta, quien aproximadamente a las 11:15, ante nuestra llamada señaló que no podía hablar con el argumento de que se encontraba en una reunión.
Prometió comunicarse con nosotros más tarde para hablar al respecto, pero nuestras posteriores llamadas hasta las 17:00 resultaron infructuosas.
Militares se instalan en cinco puntos
Las fuerzas militares iniciaron ayer las primeras acciones con cinco puntos de barrera en el departamento de Concepción, con la intención de capturar a miembros del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Por otro lado, las intensas lluvias caídas durante casi todo el día frenaron los operativos policiales en los alrededores de Arroyito.
Varias decenas de militares se movilizaron desde la madrugada de ayer en cinco puntos del Primer departamento, para efectuar controles en la vía pública.
Las barreras fueron instaladas en el cruce principal de la ciudad de Horqueta, sobre la Ruta V, Puentesiño, Loreto, la ciudad de Concepción y Yby Yaú, con la intención de cercar y capturar a los miembros del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Las tareas de los agentes castrenses fueron acompañadas por los agentes policiales, que se instalaron en número inferior en los sitios de verificación, según se pudo observar.
Los operativos consistieron en la verificación de documentos de vehículos y de personas.
Los militares abordaron transportes públicos, revisaron valijeras de automóviles y exigieron documentos de las motocicletas. La Policía colaboró principalmente en la comparación de datos técnicos de los documentos y los rodados.
Sin embargo, fuentes de la Policía y de las Fuerzas Armadas señalaron que recién a partir de hoy se realizarán incursiones en los montes de la zona de Arroyito, en el distrito de Horqueta, como otros puntos del departamento de Concepción. Igualmente se intensificarán los controles, ya que ayer se sumaron los refuerzos provenientes principalmente de Asunción.
Mucha lluvia
Por otro lado, las intervenciones policiales en la zona del asentamiento Núcleo 3, localidad de Arroyito, fueron prácticamente suspendidas ayer por las fuerzas especiales de la Policía, como consecuencia de las intensas lluvias caídas durante casi todo el día. Los uniformados no realizaron intervenciones en los alrededores de donde se produjo el tiroteo que acabó con la vida de un agente policial y dos peones y un capataz de estancia.
26 abr 2010
Estado de excepción genera incertidumbre en ganaderos
El representante del gremio en Concepción, Luis M. Saldívar, quien sostuvo que los productores de la zona están con la incertidumbre de cómo se va a aplicar la medida, consideró que el respaldo legal debe constituir la reacción de la República ante la presencia de efectivos del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Fue tajante al indicar que es una situación en que no se debe fracasar.
Raúl Rivarola, de la regional Alto Chaco (que incluye la zona de Agua Dulce, en donde se montó un operativo de rastrillaje a dirigentes del EPP), consideró que los ganaderos deben apoyar al Gobierno y de ser posible poner a disposición de las fuerzas públicas toda la cooperación disponible. Aunque también pidió que el Gobierno cumpla con su rol. "Hace años perseguimos a funcionarios de varias instituciones a que cumplan con su trabajo y no dejar una zona con ausencia de Estado", refirió.
Luis Villasanti, de Concepción, igualmente sostuvo que se trata de un grupo de guerrilleros y que la actitud gremial debe incluir el apoyo a los propios dirigentes de la ARP y de los socios más afectados.
Silfrido Baumgarten, de San Pedro, dijo que existe incredulidad en que haya buenos resultados, por lo que algunos están escépticos al respecto.
Carlos Pereira consideró que cada sector debe contribuir con su función al recordar que el Gobierno es el que debe garantizar la seguridad y no los productores.
El tema seguirá debatiéndose en reuniones de la comisión directiva, se informó tras la finalización de la asamblea.
“Nosotros sabemos que estos del EPP tenían contacto con la Policía”
Concepción.- (LN) Dicen que en la zona hay montes impenetrables, mucha pobreza, gente malintencionada, complicidad de la policía y ausencia de Estado.
Es uno de los más ácidos críticos del abandono del Norte, en donde la enorme brecha entre ricos y pobres separa las aguas como el milagro bíblico del Mar Rojo. Dice que la pobreza es el caldo de cultivo de los grupos subversivos y critica el estado de excepción de Lugo. Se llama Pablo Cáceres, pero se lo conoce como Pa’i Pablito, el referente más carismático y popular de Concepción. –¿Por qué aparece el EPP y por qué en Concepción? –Por dos cosas: por la ausencia del Estado que se aprovecha para muchas cosas malas. Hay mucha incomunicación, mucha fluidez de gente desconocida, extranjeros, incursión de brasileños de dudosa procedencia que tienen relación con el narcotráfico, rollotráfico y que hacen lo que quieren en muchas partes. –¿Y el otro factor? –Que hay mucho descontento. Hay mucha pobreza, muchas carencias, malos servicios, caminos intransitables, poca atención a la salud, a la educación, en fin, hay un descontento generalizado. –Concepción y San Pedro son las ciudades más pobres del país. –Sí y hay mucha gente que se aprovecha de la pobreza y no tiene reparo para meterse en cualquier grupo, en cualquier cosa. Está muy relacionado al abigeato, al rollotráfico, a la narco-ganadería. Hay muchas zonas en donde hay ganaderos “florecientes”. –¿Concepción se está “cartelizando”? –Yo no diría que se llegó a eso, pero podríamos estar camino a eso. Resulta que en Concepción y en parte de San Pedro todavía hay montes impenetrables que se aprovechan para cualquier tipo de bandidaje, digamos. Y hay gente del gobierno metida. –¿Quiénes son? –Hablo de agentes de policías que manejan, que conocen a estos secuestradores y criminales. Y no me extrañaría que los narco-ganaderos tengan sus tentáculos en la Policía Nacional. –¿Informantes? –Como mínimo. Para mí la Policía Nacional así como está no es confiable. –¿Por qué? –Porque nosotros sabemos que estos grupos del EPP tenían contacto con la Policía Nacional. Que policías estaban informados de los movimientos, y que incluso tenemos comunidades como Kuruzú de Hierro que se movilizaron, que fueron a denunciar a la Policía y ellos les dijeron: “dejen nomás de acusar o dar parte, yo voy a saber lo que hago”. Y nunca hizo nada. –¿Quién fue este policía? –Había uno de apellido Catebecke. A mí vino uno en el Obispado y yo les dije: “bueno, digan adonde deben decir”. Y ellos le contaron a Filizzola cuando se inauguró aquel puesto militar. Le dieron nombres y apellidos. Pero nunca hicieron nada. –El oficial sigue aquí. –No, no sé en donde está. A mí me consta porque yo recibí a esa gente de Kuruzú de Hierro. –¿Cuál es la solución que debe dar el gobierno para que no exista EPP en el Norte? –Debe poner en marcha un paquete de soluciones. Que contemple la solución efectiva en obras viales, en salud pública, en educación con una mejor atención a las escuelas y colegios, en electrificación de las comunidades, porque realmente hay muchas comunidades que viven en forma muy precaria. Viven en forma muy indigna –Y ahora se viene el estado de excepción. –Sí. Si el Estado se quiere hacer presente debe venir, no con policías, con gente que venga a hacer aparatosos apresamientos, sino con soluciones reales, efectivas, humanas. Cosas más positivas y no represivas. –Con Fernando Lugo, cambió Concepción, mejoró en algo? –No. No hubo mucho cambio. Ha habido promesas que no se cumplieron hasta ahora. En camino, por ejemplo, es bien poco lo que se avanzó. Estamos aislados como siempre. Los caminos son intransitables y asesinos… –Siempre prometen, pero… –Hay discursos de buenas intenciones, pero a nosotros no nos contenta eso. Mirando la zona, en Kuruzú de Hierro, por ejemplo, hay gente que está tirada a su suerte. Mientras, las instituciones se tiran las culpas y no hacen nada. –El presidente de la ARP regional reconoce que sin reducir la pobreza, el EPP seguirá en el Norte. –Y la pobreza es el caldo de cultivo de este tipo de grupos subversivos. Sucedió en Colombia, sucedió en Venezuela, en Argentina. Cuando hay mucha miseria, es normal que existan grupos descontentos. Y es normal que existan grupos que se aprovechan de los descontentos. –¿Cómo se aprovechan? –Les meten en la cabeza que tienen que levantarse en armas, matar a los ricos, sacarles lo que tienen, cortarles los alambrados. Es normal que aparezcan ese tipo de cosas cuando el estómago está vacío y cuando las necesidades básicas no se satisfacen.
LA NOTICIA DESTACADA
Padre herido tras defender a su hija de violento asalto en Concepción
Una familia fue atacada en su vivienda en Concepción, cuando un hombre intentó robar a una joven y, al ser sorprendida, fue defendida por su...
Noticias Destacadas del Paraguay
NOTICIAS INTERNACIONALES
PROMOCIONE SU EMPRESA AQUI
INTERESADOS EN PUBLICAR ACA FAVOR ESCRIBIR CONSULTAS Y DATOS A:
concepcionoticias@gmail.com