Militares que participaron del operativo conjunto en el Norte del país no pueden regresar a Asunción ni ser relevados, porque las FF.AA. no cuentan con combustible para movilizar a las tropas. Además, tienen que colaborar entre sí para comer, porque se acabaron las provistas.
Una fuente militar del destacamento montado en el predio de la estancia "Santa Adelia", de Arroyito, distrito de Horqueta, se quejó ayer de que el Cap. José María Belotto, jefe del cuartel, les anunció que el relevo que estaba pactado para hoy quedaba postergado porque no hay rubro para combustible de los camiones que deben transportar a los efectivos a sus distintas unidades de Asunción.
Esta noticia afectó anímicamente a agentes castrenses, quienes arribaron a la zona Norte del país para cumplir con la misión de capturar a los miembros del EPP, en los montes de la región. Sin embargo, los uniformados no realizaron una sola incursión en el bosque detrás de los guerrilleros, pese a que justamente fueron entrenados para misiones similares.
El Cap. Belotto, según nuestro informante, solicitó colaboración económica a los agentes para la compra de carne y verduras, pero casi ninguno de los militares tiene dinero, ya que aún no cobraron sus salarios y dependen sólo de la plata que les envían sus familiares o del ahorro personal.
Es que los víveres, que no fueron provistos de acuerdo al tiempo de la misión conjunta, se acabaron hace varios días y los militares soportan hambre la mayor parte del día, excepto cuando se alimentan de las frutas que hallan cerca de los caminos rurales donde montaron puestos de control.
A veces, cuando encontraban una planta de naranja o mandarina con muchos frutos, comunicaban del "hallazgo" a otros camaradas y juntaban los alimentos para proveer a los demás compañeros de la base, de acuerdo con nuestra fuente. Del destacamento montado en el casco principal del establecimiento ganadero dependen alrededor de 40 efectivos militares.
En colectivo
Nuestro informante reveló también que los oficiales superiores les dijeron que "tal vez haya forma de acercarles hasta el RI 10 Sauce", que queda en la entrada a Concepción. Sin embargo, los soldados que completaron la misión deben ingeniarse para pagar sus pasajes y viajar en colectivo hasta la capital del país.
Sólo cinco días para descansar
Los militares que consigan la plata para el pasaje y logren llegar a Asunción hoy sólo tendrán cinco días de descanso y luego deberán volver a unirse a sus respectivas unidades movilizadas en la zona Norte del país. Sucede que el presidente Fernando Lugo, quien anunció la suspensión del estado de excepción, declaró que las tareas conjuntas entre policías y militares continuarán. Los que no tienen medios para llegar a Asunción para descansar con su familia pasarán otras semanas consecutivas afectados a la misión, soportando hambre.