Pto. Casado.- (UH) Más de un centenar de niños de cuatro barrios carenciados de Puerto Casado, Departamento de Alto Paraguay, están siendo beneficiados con un nuevo comedor que se habilitó en la localidad chaqueña.
Se abrió mediante la conformación de una comisión de madres de familia preocupadas por la situación carente por la que atraviesan los niños de varios sectores de la localidad, ubicada a orillas del río Paraguay.
La Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) se encargó de proveer las mercaderías para emprender la iniciativa que surgió de los vecinos de los barrios San Miguel, San Juan, María Auxiliadora y Santa Teresita.
Los víveres que la SEN envió para el comedor son para cuatro meses aproximadamente y contienen todos los alimentos básicos para la cocina. Algunos artículos que faltan, como verduras y carnes, las mujeres responsables de la cocina para completar los ingredientes se ingenian para conseguirlos, y realizan actividades diversas, como rifas, que les ayudan a recaudar el dinero necesario.
La comisión que se conformó para llevar a cabo el comedor está integrada en su mayoría por mujeres, pero aún no tienen un local dónde ubicar a los niños que asisten diariamente a alimentarse. Por ahora, la cocina provisoria se está montando en casas particulares.
Esperan que la Municipalidad local les apoye a la hora de presentar el pedido de un terreno dentro del casco urbano para levantar el albergue que se necesita.
Algunas personas de buena voluntad colaboran con el emprendimiento, generando entusiasmo entre los moradores que llevan adelante el proyecto y que beneficia a muchos niños humildes de la comunidad. Mientras tanto instan a las autoridades y organizaciones a colaborar para que se mantenga este tipo de iniciativas. Hasta el momento, los pedidos realizados ante la Gobernación para algún aporte fueron rechazados por las autoridades, pero igual las mujeres siguen adelante.
Se abrió mediante la conformación de una comisión de madres de familia preocupadas por la situación carente por la que atraviesan los niños de varios sectores de la localidad, ubicada a orillas del río Paraguay.
La Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) se encargó de proveer las mercaderías para emprender la iniciativa que surgió de los vecinos de los barrios San Miguel, San Juan, María Auxiliadora y Santa Teresita.
Los víveres que la SEN envió para el comedor son para cuatro meses aproximadamente y contienen todos los alimentos básicos para la cocina. Algunos artículos que faltan, como verduras y carnes, las mujeres responsables de la cocina para completar los ingredientes se ingenian para conseguirlos, y realizan actividades diversas, como rifas, que les ayudan a recaudar el dinero necesario.
La comisión que se conformó para llevar a cabo el comedor está integrada en su mayoría por mujeres, pero aún no tienen un local dónde ubicar a los niños que asisten diariamente a alimentarse. Por ahora, la cocina provisoria se está montando en casas particulares.
Esperan que la Municipalidad local les apoye a la hora de presentar el pedido de un terreno dentro del casco urbano para levantar el albergue que se necesita.
Algunas personas de buena voluntad colaboran con el emprendimiento, generando entusiasmo entre los moradores que llevan adelante el proyecto y que beneficia a muchos niños humildes de la comunidad. Mientras tanto instan a las autoridades y organizaciones a colaborar para que se mantenga este tipo de iniciativas. Hasta el momento, los pedidos realizados ante la Gobernación para algún aporte fueron rechazados por las autoridades, pero igual las mujeres siguen adelante.