Desde el 17 de agosto del 2013, cuando el grupo criminal asesinó a 5 personas en la Estancia Cororo de Tacuatí, los investigadores manejaban la información de que una célula compuesta de entre 10 a 12 combatientes comandada por Manuel Cristaldo Mieres y secundado por Lucio Silva, migraron al Departamento de San Pedro en donde sucesivamente realizaron ataques, asesinatos de civiles y policías, además de 2 secuestros que hasta ahora siguen sin ser aclarados.
Las declaraciones de personas que fueron tomadas de rehenes en la estancia El Ciervo en setiembre del año pasado refuerzan esa hipótesis. El mismo Cristaldo Mieres les advirtió que ellos se adueñaban de esa zona y que estaba prohibido seguir talando árboles y la destrucción del medio ambiente y la respuesta de la FTC fue la de instalar campamentos en varios establecimientos ganaderos de la zona, pero sin éxito en la lucha.
El grupo comandado por Osvaldo Villalba y Magna Meza, según los investigadores, opera entre Tacuatí, San Pedro, Kurusu de Hierro y Arroyito de Concepción; al oeste de la ruta 3 Gral. Elizardo Aquino; mientras que la célula de Cristaldo Mieres opera en Río Verde, Nuevo México y parte del Departamento del Amambay, al este de la ruta 3.
Esta zona esta conectada a un corredor ocupado por establecimientos ganaderos donde aún existen varias zonas boscosas que posibilitan que ellos recorran sin inconvenientes un área conocida ampliamente por ellos y que tienen como referencia al Río Ypané, que es el límite natural entre Concepción y San Pedro. El secuestro de Abrahán Fehr fue obra del grupo de Osvaldo Villalba y del adolecente Franz Wiebe lo hizo la célula comandada por Cristaldo Mieres, según se desprende de las declaraciones de los testigos.