Según el capitán Emigdio Zayas, prefecto Naval de Concepción, las lluvias registradas la semana pasada lograron que el nivel del río mantenga su nivel, sin embargo, sigue siendo crítico porque se complica la navegación para embarcaciones de gran porte. Hasta el momento sigue activo un buque de pasajeros.
“Hay embarcaciones que están amarradas en la zona por la poca cantidad de agua. Esta lluvia apagó la bajante, porque todos los días era un punto menos, esto sería para la zona norte desde Bahía Negra hasta Remanso Castillo, donde es muy complicada la navegación”, detalló Zayas, en entrevista con el corresponsal de Nación Media.
Indicó que desde la Prefectura General Naval confirmaron que actualmente el calado desde Vallemí hasta Castillo es de 6 pies con seis, lo que indica que cualquier navío buque, remolcado y su tren de barcaza deben estar calando a menos de esa medida, porque pueden quedar encallado.
“La mayoría de las embarcaciones están llevando granos, minerales, líquidos y todos aquellos productos que mueven el país, siempre tienen gran peso. De los tres buques que llevan pasajeros solo uno está activo, porque es pequeño denominado “Dalma” que va hasta Itapukumí. Los demás están amarrados por la bajante y en la zona tenemos tres puntos difíciles para la navegación”, puntualizó.
Apuntó que en la zona están trabajando tres dragas que están haciendo posible la navegación y que no falte provisión de alimentos en el departamento. “Estas dragas están trabajando en zonas conocidas como La Novia, Yacaré y Pedernal. Estamos esperando que llueva en zona de Brasil para que la naciente del río pueda subir”, concluyó.
Fuente: LN