
El puente ubicado en esta comunidad, a 46 kilómetros al noreste de la ciudad de Concepción, está a punto de caer. Los vehículos livianos apenas lo cruzan, mientras ni el MOPC ni la Gobernación departamental pueden repararlo debido al repunte de las aguas del río Aquidabán después de las últimas lluvias.
Los vecinos, colonos, ganaderos y comerciantes que utilizan el puente de madera de 137 metros de longitud y un promedio de 10 de altura, se quejan por los permanentes problemas en la estructura que está a punto de venir abajo.
A simple vista, se puede apreciar que el puente está inclinado hacia la cabecera oeste porque los pilotes que sujetan las vigas empezaron a ceder por la presión de raigambres, gajos y troncos de frondosos árboles arrastrados por las aguas del Aquidabán.
De acuerdo a Adrián Arce, de la secretaría de Obras Públicas de la Gobernación departamental, las últimas lluvias registradas entre los departamentos de Amambay y Concepción ocasionaron el rápido deterioro del puente.
Además, señaló que la inconsciencia de los transportistas de rollos de maderas aserradas, cemento y ganados contribuye a que el puente rápidamente vuelva a tener problemas.
Según Lourdes García, una de las ganaderas de la zona, es un abuso de la Gobernación departamental que reciba dinero en concepto de peaje que va desde 5.000 hasta G. 150.000, según el tipo de vehículo.
En su momento, el jefe de Obras Públicas de la Gobernación, ingeniero Julio Arredondo, y el secretario general de la Gobernación de Concepción habían informado que los ingresos no superan los 50 millones de guaraníes en promedio, suma ínfima para el mantenimiento tanto del puente como de la ruta, que sigue esperando ser pavimentada.
Por su parte, el jefe de Obras del distrito del MOPC, ingeniero Losnardi Colmán, señaló que la máquina hincapilotes está aguardando que baje el nivel de las aguas para empezar a reparar el puente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario