La Industria Nacional del Cemento (INC) sigue paralizando al país al desabastecer el mercado. Mientras, pobladores de Vallemí se manifiestan en contra del traslado del motor del molino de crudo e impiden la producción del pórtland.
La cementera estatal no está produciendo el material de construcción porque el motor del molino situado en Villeta había sufrido una falla técnica. Para reactivar la producción, técnicos de la entidad recomendaron el traslado del motor del molino del crudo (material con que se fabrica el clínker, materia prima del cemento), que está en Vallemí, a la planta de Villeta. Con esta medida, la cantidad despachada por la INC será inferior a la que se estaba teniendo, entre 45.000 y 50.000 bolsas del pórtland por día. Empero, por lo menos paliaría los problemas del desabastecimiento con un 70% de la producción que se venía realizando. Según referentes de la estatal, la provisión sería de 35.000 bolsas por día, pero con las entregas realizadas en un pequeño molino de cemento situado también en Vallemí, la cifra llegaría a 45.000 ó 47.000. Sin embargo, cuando se anunció el traslado del motor, los pobladores de Vallemí, liderados por funcionarios de la INC de esa ciudad, realizaron una manifestación en contra de tal medida. De acuerdo a los referentes del sector, los trabajadores temen quedarse sin sus puestos con el paro de la producción del clínker. Además, dicen que no es seguro el rendimiento esperado. Impidieron intervención de la FOPE Según lo informado por nuestras fuentes, los manifestantes impidieron ayer por la mañana que un avión de la Fuerza de Operaciones de Policía Especializada (FOPE) bajara en el lugar. Indicaron que los vallemienses colocaron sus vehículos en la pista de aterrizaje y que lograron la partida de la FOPE, sin que pise suelo de Vallemí.
Traslado no dañará el motor, afirman
La decisión de trasladar el motor de Vallemí a Villeta fue consensuada por técnicos especializados del sector, según los informes oficiales de la INC.
Además, también se contó con asesoría externa, ya que los técnicos de la cementera consultaron a la firma que montó las plantas de la entidad, de Vallemí y de Villeta, acerca de la factibilidad del traslado del motor y el rendimiento que tendrá.
Los especialistas respondieron que la medida es totalmente fiable, toda vez que se disminuya la potencia en que trabajará el motor.