Monseñor Zacarías Ortiz ya no quiso explayarse sobre el tema, solo se limitó a decir que su recomendación al gobierno del ex obispo Fernando Luego es que solucione su problema con su par del Brasil, Luiz Inacio Da Silva, de manera diplomática. En otro momento, el prelado mencionó que las masivas invasiones de las propiedades que están en poder de colonos de origen brasileño en el interior del país responden a la urgencia de que el Gobierno de Lugo establezca la reforma agraria. Sin embargo, advirtió que “muchas veces se crean de la nada organizaciones que se vuelven ilegítimas; entonces, es ahí que estaremos llegando a una suerte de anarquía total”. Agregó que si los campesinos tienen la esperanza de lograr de esta forma que el gobierno apresure la reforma agraria, “este no es el camino ideal para lograrlo”, aclaró.
Deben comprender
“Yo digo que todos aquellos responsables de tierras, ya sean latifundistas, empresarios, aquellos que se dedican a la industria del agro, ellos deben comprender de alguna manera lo que los campesinos están reclamando. No puede ser que en el Paraguay haya gente que tenga demasiadas tierras mientras que los campesinos no tienen nada de tierra”, refirió. Dijo estar en desacuerdo con aquellos que recurren a hechos ilegales para conseguir la reforma agraria. “Estoy de acuerdo con que presionen al Gobierno nacional de manera pacífica. Tiempo atrás la gente presionaba mediante manifestaciones, barricadas, etc., entonces, este tipo de presión obliga al Gobierno a entablar un diálogo”, comentó.
Desenfreno
“Pero esta forma de invadir las propiedades privadas sin previas conversaciones y exigir respuestas de que el Gobierno les compre esas tierras, no es un modo, es más bien una anarquía, un desenfreno”, subrayó. Instó al Gobierno de Fernando Lugo a apresurar la reforma agraria “para que la persona que quiera hacer trabajar una tierra, que le den para su tierra”.