Los 70 trabajadores son empleados directos de la empresa Calería Guyrati, propiedad de Rubén y Derlis Martínez, de Asunción, que dejaron de abonar hace 4 meses los salarios de los mismos y tienen 3 meses de atraso en el pago por el seguro social, por lo cual ninguno de ellos puede recibir atención en el Hospital del Instituto de Previsión Social (IPS) de Concepción.
Además hay 80 trabajadores informales que son los estibadores, en su mayoría niños y nativos de la zona, cuyo trato es más inhumano, según explicaron los enojados pobladores. “Acá trabajamos desde que caminamos, antes nos callábamos, pero ahora ya no, porque estamos cansados de la explotación”, dijo uno de los trabajadores.
La Calera Guyrati está ubicada junto al río Paraguay, al norte del puerto de Concepción, donde los trabajadores se declararon en huelga y pararon todas las actividades. Incluso, ya denunciaron la situación a la Oficina Regional del Ministerio del Trabajo de Concepción, que está intentando una reunión con la patronal.
Los afectados esperan solución, caso contrario amenazan parar la institución educativa, ya que desde hoy lunes dejarán de enviar a sus hijos a la escuela.