Casadeños piden paz y trabajo en un festival organizado en la ciudad

PUERTO CASADO, Alto Paraguay (Especial).
Puerto Casado vivió una jornada atípica el domingo pasado, con un escenario poco habitual para la comunidad: banderas paraguayas y pancartas pidiendo paz. Un escenario distinto para una ciudad empobrecida por la corrupción política y la intolerancia religiosa. Los casadeños dieron un rotundo respaldo al llamado por la paz.

A lo largo del último domingo, la comunidad de Puerto Casado vivió una jornada de paz. Más de dos mil personas se congregaron en el predio de Victoria SA para seguir las alternativas del Global Peace Festival.
El evento se inició con una caravana que contó con la participación de mil personas, encabezadas por jinetes que portaban una gigantesca bandera paraguaya.
El festival se desarrolló en el área de piscicultura, dentro del predio de Victoria SA, donde se montó un escenario. Artistas de la región así como invitados especiales de Asunción se sucedieron, dando un mensaje de paz a una comunidad que soporta una grave crisis social por la intolerancia del liderazgo político y religioso que controla la ciudad.
Ernesto Orbegoso, vicepresidente de Victoria SA, señaló que “Puerto Casado dio un rotundo respaldo a nuestro mensaje de paz. Los casadeños quieren tranquilidad y una vida armónica en la ciudad”.

Provocaciones del sacerdote

La radio Quebracho Poty, propiedad de la parroquia local, realizó una intensa campaña radial en procura de desalentar la participación ciudadana en el festival por la paz.
El mismo cura párroco, Martín Rodríguez, tomó el micrófono de la radio comunitaria para pedir a la gente que no acuda al predio de Victoria SA.
Por otro lado, dirigentes de la Comisión Pro Tierra intentaron realizar una manifestación, para cortar el ingreso de la gente al sector de piscicultura.
Unas 20 personas estuvieron alrededor de Francisco Dick y Cristóbal Notario, mirando impotentes cómo la gente se presentaba para pedir paz y trabajo en Puerto Casado.