El procedimiento continúa en la cárcel de Concepción, que está ubicada a cinco kilómetros del casco urbano de la mencionada ciudad.
El operativo se realiza debido a que la Policía tiene indicios de que desde la cárcel de Concepción se hacen llamadas extorsivas a ciudadanos, reportó el corresponsal Aldo Rojas.El allanamiento comenzó aproximadamente a las 5:15 y hasta el momento se hallaron teléfonos celulares y US$ 13.000 en poder de una mujer que estaba como compañía del condenado por narcotráfico Víctor Royg.
La Policía y el fiscal continuarán esta mañana buscando más evidencias en el interior del penal norteño.
Un condenado por narcotráfico supuestamente tenía planeado fugarse de la cárcel de Concepción, según evidencias que se incautaron este miércoles en el sitio.El fiscal Federico Delfino y una comitiva policial allanaron este miércoles la cárcel de Concepción, ante denuncias que desde el sitio se realizaban llamadas extorsivas.
Delfino se incautó de US$ 13.000 del poder de María Nilda Lucía Echagüe, quien estaba como compañía del recluso Víctor Royg, condenado por tráfico de drogas en el caso conocido como “zafiro”.Justamente, la sospecha es que el dinero iba ser usado para la fuga, porque existe una orden judicial de trasladar al recluso a un centro asistencial por motivos de salud, reportó el corresponsal Aldo Rojas.
La orden judicial data del 23 de noviembre pasado y fue firmada por el juez Ángel Aguirre, pero el director de la cárcel, Miguel Domínguez, no la cumplió, porque en todo este tiempo observó que Royg estaba bien de salud.
Los intervinientes creen que, con la suma en dólares y aprovechando el traslado, Royg se iba a fugar o sería rescatado por sus amigos.
La comitiva también se incautó de una gran cantidad de teléfonos celulares, que son artículos prohibidos en el interior de un penal.
EXTORSIÓN
Los intervinientes identificaron al interno Juan José Gill como el recluso que supuestamente realizaba llamadas extorsivas desde la prisión.Gill se hacía pasar por integrante del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) y extorsionaba a ganaderos y empresarios de la zona. De su poder se incautaron teléfonos celulares, informaron fuentes policiales.
Fuente: ABC
Los intervinientes identificaron al interno Juan José Gill como el recluso que supuestamente realizaba llamadas extorsivas desde la prisión.Gill se hacía pasar por integrante del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) y extorsionaba a ganaderos y empresarios de la zona. De su poder se incautaron teléfonos celulares, informaron fuentes policiales.
Fuente: ABC
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