SAN LÁZARO, Concepción. San Lázaro reclama la intervención del Indert con la esperanza de poner fin al conflicto por los cerros de caliza que rodean a la comunidad. La ciudadanía lleva más de 50 años esperando que su principal recurso económico vuelva a ser un patrimonio social. Indert sigue dilatando su respuesta.
Miguel Sevila |
San Lázaro aguarda la intervención del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) con la esperanza de recuperar su principal recurso económico, los cerros de caliza que rodean a la ciudad.
El titular del Indert, Lic. Justo Cárdenas, se ufana con frecuencia de llevar adelante la tarea de recuperar tierras que fueron despojadas al Estado.
San Lázaro es una excelente oportunidad para demostrar compromiso en esta tarea: la comunidad perdió en 1964 los cerros de piedra caliza y desde entonces se encuentran en manos privadas, en forma irregular.
Lo irónico del caso es que el mismo antecesor del Indert, el Instituto de Bienestar Rural, fue el que entregó las tierras del Estado.
Esta decisión se ve reflejada en la resolución 1.258 del 16 de noviembre de 1964 que concede derecho de explotación de caliza en cuatro cerros en favor del señor Alberto Zacur.
La resolución del entonces instituto agrario gubernamental fue violada: Alberto Zacur, a pesar de la expresa prohibición de ceder su concesión, vendió la tierra a la firma Minera San Lázaro.
La abierta violación al Estatuto Agrario permite recuperar la tierra y entregarla nuevamente a la comunidad.
A diferencia de otros casos, como es la colonia Santa Lucía, por ejemplo, en San Lázaro no existe ninguna duda de la legitimidad y legalidad de la reivindicación de la ciudadanía.
Miguel Sevila, titular de la Asociación de Caleros Unidos y Afines de San Lázaro, explica en pocas palabras la lucha que llevan adelante: “La ciudad vive de la producción de piedra caliza. No hay otra alternativa económica salvo trabajar en la explotación de caliza, por eso los cerros se convirtieron en una reivindicación ciudadana”.
¿Cuanto tiempo más aguardarán la intervención del Indert?
El reclamo de San Lázaro tiene más de 50 años y ya es momento de devolverle la esperanza de mejores días.
ABC
El titular del Indert, Lic. Justo Cárdenas, se ufana con frecuencia de llevar adelante la tarea de recuperar tierras que fueron despojadas al Estado.
San Lázaro es una excelente oportunidad para demostrar compromiso en esta tarea: la comunidad perdió en 1964 los cerros de piedra caliza y desde entonces se encuentran en manos privadas, en forma irregular.
Lo irónico del caso es que el mismo antecesor del Indert, el Instituto de Bienestar Rural, fue el que entregó las tierras del Estado.
Esta decisión se ve reflejada en la resolución 1.258 del 16 de noviembre de 1964 que concede derecho de explotación de caliza en cuatro cerros en favor del señor Alberto Zacur.
La resolución del entonces instituto agrario gubernamental fue violada: Alberto Zacur, a pesar de la expresa prohibición de ceder su concesión, vendió la tierra a la firma Minera San Lázaro.
La abierta violación al Estatuto Agrario permite recuperar la tierra y entregarla nuevamente a la comunidad.
A diferencia de otros casos, como es la colonia Santa Lucía, por ejemplo, en San Lázaro no existe ninguna duda de la legitimidad y legalidad de la reivindicación de la ciudadanía.
Miguel Sevila, titular de la Asociación de Caleros Unidos y Afines de San Lázaro, explica en pocas palabras la lucha que llevan adelante: “La ciudad vive de la producción de piedra caliza. No hay otra alternativa económica salvo trabajar en la explotación de caliza, por eso los cerros se convirtieron en una reivindicación ciudadana”.
¿Cuanto tiempo más aguardarán la intervención del Indert?
El reclamo de San Lázaro tiene más de 50 años y ya es momento de devolverle la esperanza de mejores días.
ABC
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