Transitar por los caminos del norte chaqueño es una odisea

FUERTE OLIMPO. Debido a que los caminos están en desastrosas condiciones, llegar a algunas localidades de Alto Paraguay, como la propia capital, Fuerte Olimpo, es toda una odisea.

En algunos casos se tarda hasta una semana en transitar los más de 800 kilómetros por tierra, porque con una pequeña lluvia los trayectos se vuelven verdaderos lodazales. De esta manera resulta muy difícil que los turistas visiten la comunidad, por lo tanto, el bello atractivo natural de la región continuará beneficiando únicamente a los inversionistas brasileños, quienes ofrecen alternativas de excursión a la zona del pantanal por cómodos y seguros caminos.

El gobernador del departamento, Justo Fernández Bauza (ANR), maneja un presupuesto de G. 12.600 millones para el 2009, que aún no ha sido invertido en obras sociales y de explotación turística, que sin lugar a dudas es la alternativa para el progreso regional.

La capital de Alto Paraguay, Fuerte Olimpo, está rodeada de una magnifica vegetación donde sobresale el majestuoso río Paraguay, que riega las costas del enorme pantanal de Mato Grosso, situado del lado brasileño.

El gran pantanal aún alberga cientos de animales silvestres en peligro de extinción, que pueden servir de gancho para explotar el ecoturismo. También hay variedad de hermosas aves, aunque, indudablemente, la actividad pesquera es una de las más explotadas, pese a la desidia de las autoridades incapaces de promover proyectos de aprovechamiento económico.

Fuerte Olimpo también cuenta con sitios históricos que podrían ser visitados por los turistas, como el Fuerte de Borbón, sus maravillosos cerros y la catedral de María Auxiliadora.

Sin embargo, toda actividad turística es aprovechada únicamente por los brasileños que poseen infraestructura al servicio de los turistas, Mientras, nuestros compatriotas solo acceden a pequeñas migajas, gracias a las limitadas ventas de carnadas para la pesca.