SAN CARLOS, Dpto. de Alto Paraguay (ABC).Los pobladores de San Carlos, ex población obrajera asentada a 95 km de Fuerte Olimpo, en el Dpto. de Alto Paraguay, se desenvuelven en medio de la extrema pobreza y el abandono absoluto de sus autoridades. El intendente de Olimpo, Sergio Cuéllar (ANR), prometió una línea telefónica y agua potable.
El lugar, como tantos otros del departamento, fue vendido con población incluida, por sus antiguos dueños extranjeros, quienes por varias décadas depredaron los bosques de la región con la tala indiscriminada de quebracho.
En la década de los 60 y 70 esta comunidad contaba con más de 5 mil habitantes. Las viviendas de karanda’y eran confortables y numerosas. Se contaba con el servicio de energía eléctrica las 24 horas, mediante la utilización de enormes motores generadores a diésel.
El tránsito era constante, pues enormes y numerosos camiones se encargaban de transportar rollos de quebracho hacia el puerto de Boquerón, a orillas del río Paraguay, y de ahí a la comunidad de Puerto Casado, para la elaboración del tanino.
Cuando en los 80 y 90 se dejó de producir el tanino, debido a la poca rentabilidad del producto, las numerosas fábricas que existían en la zona comenzaron a declararse en quiebra, por lo que estos pueblos quedaron convertidos en comunidades fantasmas.
Muchas personas que no tenían adónde ir, debido a sus precarias condiciones económicas, no tuvieron otra opción que quedarse a vivir en el lugar.
Actualmente, la mayoría de la población, que apenas supera los 300 habitantes, se dedica a ser peón en las numerosas estancias brasileñas de los alrededores.
El distrito cuenta con una precaria comisaría y puesto de salud. El único enfermero del lugar, Ruperto Rodríguez Bernal, trata de lidiar con los numerosos problemas de salud de los pobladores, sin contar con medicamentos suficientes ni infraestructura, para posibles internaciones. La escuelita no supera los 50 alumnos, del 1º al 6º grado, quienes están a cargo de solo dos profesores.
La localidad fue beneficiada recientemente con el servicio de energía eléctrica de la Itaipú; sin embargo, entre sus pobladores aún se notan la pobreza extrema en que viven y la casi nula ayuda de sus autoridades.
La población corresponde al distrito de Olimpo, cuyo intendente, Sergio Cuéllar (ANR), prometió a los pobladores que a fin de mes se instalará una línea de Copaco, a fin de que las personas se puedan comunicar con el resto del país. Del costo se encargará el municipio sumado a un aporte del diputado José Chamorro. El político adelantó también que en breve los diferentes hogares contarán con el servicio de distribución de agua, pues ya se cuenta con un tanque de 10 mil litros, cientos de metros de caños y un generador, donado por las autoridades municipales salientes.
Estos equipos corren el serio riesgo de dañarse, porque desde hace bastante tiempo están prácticamente tirados a un costado de una de las calles.
