También se oponen al uso de los tractores para el araje y la compactación de las tierras con el uso de agrotóxicos que afectan la fertilidad del suelo, contaminan el ambiente y obligan a los campesinos no capacitados para abandonarlas y emigrar a las urbes.
Fue durante una reunión el miércoles último en el oratorio San Roque González de Santacruz de Alemán Cue (Calle 11), distante a unos 25 kilómetros de Horqueta, donde analizaron la situación social y económica del campesinado paraguayo.
Participaron del encuentro el vicario de Azote’y, Pbro. Pablo Cáceres; el párroco de San Roque y San Blas, Pbro. Derlis Álvarez, y el coordinador de la Pastoral Social de Concepción. Los asistentes firmaron un acta que entregarán al Indert en que piden que no entren en sus lotes la gente del SIRT, porque hacen una engañosa política, para que los labriegos pierdan sus tierras, alegan.
El dirigente de la Coordinadora Departamental de Organizaciones Campesinas, Marciano Jara, dijo que el SIRT fue creado para que se analice la situación de las tierras de los agricultores y despojarlos de las mismas para entregarles a brasileños que copan el territorio nacional. Señaló que los emisarios vienen a esta zona para observar qué cantidad de hectáreas de sus tierras la utilizan del total y si existen remanentes, les desalojarán.
También sostuvo que Horacio Cartes impone una política que busca acabar con el campesinado al entregarles tractores para el araje y la compactación de las tierras junto al uso de agrotóxicos que afectan la fertilidad del suelo obligando a los campesinos a vender sus tierras y emigrar a las ciudades.
Por su parte, el vicario Cáceres instó a los labriegos a que se unan, junten fuerzas y enfrenten la situación para no perder sus tierras, pues si eso ocurre –dijo– desaparecerán las comunidades.
ABC