Dos problemas de antigua data, aún no ha podido solucionar la administración actual de la Municipalidad de Concepción. Las calles siguen en muy mal estado y pululan los animales sueltos dentro del radio urbano.
La inversión realizada en el mejoramiento de las calles solo se redujo en el adoquinado de la avenida Pinedo y algunas pocas calles adyacentes; sin embargo, el resto de las arterias, especialmente de los barrios Inmaculada, Villa Armando, Itacurubí, San Luis, se hallan en pésimo estado.
Con la seguidilla de lluvia se complicó la situación, ayudada por la falta de desagüe pluvial, proyecto que recién se está iniciando. Una precipitación de 20 mm basta para que las calles se encuentren en malas condiciones, tal como ocurrió el domingo pasado.
Otro problema fundamental que aún no tiene solución, es la presencia de animales sueltos por las arterias de la ciudad. Las vacas y caballos deambulan campantemente por el centro mismo, creando zozobras a los motociclistas y automovilistas, y peatones, a más de desparramar las basuras y destruir los jardines de los paseos públicos.
Los dos problemas se enfatizaron en estas fiestas de fin de año, justo cuando se tuvo mayor cantidad de visitantes.
La inversión realizada en el mejoramiento de las calles solo se redujo en el adoquinado de la avenida Pinedo y algunas pocas calles adyacentes; sin embargo, el resto de las arterias, especialmente de los barrios Inmaculada, Villa Armando, Itacurubí, San Luis, se hallan en pésimo estado.
Con la seguidilla de lluvia se complicó la situación, ayudada por la falta de desagüe pluvial, proyecto que recién se está iniciando. Una precipitación de 20 mm basta para que las calles se encuentren en malas condiciones, tal como ocurrió el domingo pasado.
Otro problema fundamental que aún no tiene solución, es la presencia de animales sueltos por las arterias de la ciudad. Las vacas y caballos deambulan campantemente por el centro mismo, creando zozobras a los motociclistas y automovilistas, y peatones, a más de desparramar las basuras y destruir los jardines de los paseos públicos.
Los dos problemas se enfatizaron en estas fiestas de fin de año, justo cuando se tuvo mayor cantidad de visitantes.
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