Sin embargo, no lo hace caminando ni en bicicleta, sino trotando y ofreciendo el sacrificio por la paz en el norte.
Se trata de Diego Armando Villalba Parra, quien había prometido a la Virgen hacer un sacrificio si conseguía que mejorara la salud de su hija Lucía Jazmín de 2 añitos. Así ocurrió y decidió con mucha fe trotar 570 Km aproximadamente, ofreciendo todo el sacrificio por la paz en el norte.
Diego comentó que se preparó hace 7 meses y que confía en que llegará a destino, porque cuenta con el apoyo de un equipo de cuatro profesionales que lo acompañan.
A las 21.40 del martes, aproximadamente, salió de la rotonda de Concepción donde fue acompañado por varios amigos y admiradores.
Su idea es descansar una hora cada 50 Km y cuando alcance los 150 hacer una pausa de 7 horas. Con ese cronograma piensa llegar a la basílica de Caacupé este domingo a la tarde.
El equipo que le acompaña lo integran los enfermeros Rodney Barúa y Pablo Fernández; César Giménez, kinesiólogo y Celso Benítez, profesor.
UH
Se trata de Diego Armando Villalba Parra, quien había prometido a la Virgen hacer un sacrificio si conseguía que mejorara la salud de su hija Lucía Jazmín de 2 añitos. Así ocurrió y decidió con mucha fe trotar 570 Km aproximadamente, ofreciendo todo el sacrificio por la paz en el norte.
Diego comentó que se preparó hace 7 meses y que confía en que llegará a destino, porque cuenta con el apoyo de un equipo de cuatro profesionales que lo acompañan.
A las 21.40 del martes, aproximadamente, salió de la rotonda de Concepción donde fue acompañado por varios amigos y admiradores.
Su idea es descansar una hora cada 50 Km y cuando alcance los 150 hacer una pausa de 7 horas. Con ese cronograma piensa llegar a la basílica de Caacupé este domingo a la tarde.
El equipo que le acompaña lo integran los enfermeros Rodney Barúa y Pablo Fernández; César Giménez, kinesiólogo y Celso Benítez, profesor.
UH
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